El presidente de Portugal llega a Madrid en su primera visita de Estado

El presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, que llegó acompañado por su esposa, fue recibido en el Pabellón de Estado del aeropuerto madrileño de Barajas por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, y el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza.

Según las previsiones, desde el aeropuerto el presidente portuguès se trasladará al Palacio del Pardo, donde será recibido por los Reyes, y posteriormente se dirigirán al Palacio de la Zarzuela, donde mantendrán un almuerzo privado.

Por la tarde, Cavaco se reunirá con el presidente del Gobierno, Josè Luis Rodríguez Zapatero, y ofrecerá una recepción a la comunidad portuguesa en la Embajada del país en Madrid, mientras que por la noche participará en un banquete de Estado ofrecido por los Reyes.

El martes, además de mantener un segundo encuentro con el presidente español y una reunión con el líder de la oposición, Mariano Rajoy, Cavaco visitará el Ayuntamiento de Madrid, el Congreso de los Diputados y ofrecerá un homenaje a las víctimas del terrorismo en el parque del Retiro.

El presidente portuguès, acompañado por los Príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia, viajará el mièrcoles a Asturias, donde se reunirá con el presidente del Principado, Vicente Alvarez Areces, y realizará diversas visitas antes de su regreso a Portugal el jueves.

Prueba de la importancia que el jefe de Estado luso da a este viaje es que lo acompañan cuatro ministros, los de Exteriores, Economía, Ciencia y Medio Ambiente. Para el Gobierno español, el que España sea el primer destino de Cavaco en sus viajes al extranjero "pone de manifiesto la óptima situación que atraviesan las relaciones bilaterales entre España y Portugal", que en el terreno de la economía y el comercio son de "gran intensidad".

La premisa es "nada de lo que pase en Portugal puede ser ignorado en España" y esto es lo que la presidencia de la república quiere hacer ver en la primera visita oficial de Cavaco. Este quiere aprovechar además la "relación especial" que tiene con el Rey Juan Carlos para "vender" a las empresas portuguesas en España.