La República del Congo se sume de nuevo en la violencia pese al fuerte despliegue de 'cascos azules'
El personal de la Embajada de España fue evacuado ayer tras un impacto de mortero, aunque no hubo heridos
Disparos de mortero y de armas ligeras vuelven a escucharse por segundo día consecutivo en Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo, donde fuerzas del Ejército y de la guardia personal del ex vicepresidente Jean-Pierre Bemba mantienen los enfrentamientos más graves desde que Joseph Kabila asumiera la Presidencia del país el pasado 6 de diciembre.
Kabila derrotó a Bemba, un antiguo líder rebelde congoleño, en las elecciones presidenciales del 29 de octubre pasado, lo que le permitió renovar el poder que tenía de facto desde el 26 de enero de 2001.
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Esa elección fue la primera votación libre y plural que se registraba en la RDC (ex Zaire) en más de cuarenta años, tras su independencia de Bélgica en 1960.
La ONU mantiene en el Congo un contingente de unos 17.000 efectivos, el mayor del todo el mundo, cuya labor es garantizar el proceso político abierto tras los acuerdos de paz firmados en el 2003 que terminaron una guerra civil abierta en 1998.
Evacuada la Embajada de España
España tuvo desplegado en este país 130 militares, que regresaron a mediados del pasado mes de diciembre tras cumplir su misión de reforzar la seguridad ante la cita electoral.
La Embajada de España en Kinshasa recibió ayer el impacto de un obús que obligó a la evacuación de todo el personal diplomático que se hallaba en su interior, el cual se encuentra en buen estado, han informado fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El embajador español en la República Democrática del Congo, Miguel Fernández Palacios, y el resto de funcionarios fueron evacuados en tanquetas por militares uruguayos de la misión de la ONU en medio de disparos.
Las mismas fuentes han informado de que el centenar de españoles que reside en Kinshasa se encuentra a salvo, después de los enfrentamientos ocurridos hoy entre soldados del Gobierno y la guardia del ex vicepresidente Jean-Pierre Bemba.
Misioneros
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se puso en contacto con el embajador español, quien le informó del ataque y de la situación tanto de los funcionarios como de la colonia española, compuesta, en su mayoría, por misioneros religiosos.
La delegación diplomática en Kinshasa está formada por alrededor de una veintena de personas, informaron las fuentes.
El personal de la Embajada fue trasladado a un edificio de la ONU, donde se encuentra "fuera de peligro", según Exteriores.