Los islamistas atrincherados en la Mezquita Roja de Islamabad se niegan a rendirse
El Ejército paquistaní amenaza con irrumpir por la fuerza tras tres días de asedio
El detenido líder de la Mezquita Roja de Islamabad, el clérigo Abdul Aziz, pidió esta mañana sin éxito a los más de mil islamistas atrincherados en el templo que se rindan. En las últimas horas lo han hecho sólo unas docenas de mujeres de su seminario pese a la amenaza de asalto de las fuerzas de seguridad paquistaníes.
El "maulana", o maestro, Aziz, quien fue arrestado ayer cuando abandonaba la mezquita camuflado bajo un burka negro, hizo ese llamamiento en una "entrevista" con la televisión estatal, pero su hermano, Abdul Rasheed Ghazi, que resiste en el interior del templo, mantuvo que ha sido forzado a hacerlo.
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Unos mil radicales islámicos continúan atrincherados en la mezquita y madrasas adyacentes, tras la rendición de unos 1.700 de ellos en los últimos dos días, en los que el Gobierno ha ido dando ultimatos y prorrogándolos constantemente.
Al menos catorce personas han muerto desde el martes, cuando se iniciaron los enfrentamientos entre los extremistas y los efectivos militares después de que la mezquita fuese rodeada por las fuerzas paquistaníes hace una semana.
En la madrugada de hoy se escucharon fuertes explosiones y tiros de arma pesada y ligera, mientras las fuerzas militares paquistaníes lograron introducirse en parte del recinto y ocupar alguna de sus instalaciones, según una fuente diplomática en Islamabad.
El jefe de la célula de gestión de crisis, Javed Iqbal Cheema, advirtió de que el Gobierno paquistaní asaltará la mezquita y la escuela coránica adyacente, la Jamia Hafsa, si los integristas islámicos no deponen las armas.
Ghazi ha condicionado la rendición a que el Gobierno no tome ninguna represalia contra los estudiantes que resisten en el templo.
