La delegada del Gobierno asegura que la muerte de un joven antifascista en Madrid a manos de un ultraderechista "no ha sido un atentado racista"
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, afirma que no consentirá que la violencia se instale en la capital
La delegada del Gobierno en Madrid, Soledad Mestre, dijo hoy que los actos que tuvieron lugar ayer en el Metro de Legazpi, entre miembros de dos grupos radicales con ideologías distintas, y que ocasionaron la muerte de un joven de 16 años, "no ha sido un atentado racista", sino un "atentado ideológico violento", y apuntó que el agredido "era un joven español".
Éstas fueron las palabras de Mestre durante la presentación hoy de los 917 nuevos agentes del Cuerpo Nacional de Policía, para los que tenía previsto un discurso que cambió, debido a los últimos acontecimientos de violencia sucedidos en la capital entre miembros de grupos nazis y antifascistas.
Más información
Al ser preguntada por la posibilidad de anular la manifestación, convocada por Juventudes de Democracia Nacional, Mestre aseguró que "no tenían ningún motivo en ese momento porque es un partido político legalmente constituido" "Conforme la ley orgánica de derecho de reunión y manifestación, en ese momento no era posible" anularla, insistió. Soledad Mestre aseguró que la manifestación de Alianza Nacional convocada para el próximo sábado en la capital, "podría ser prohibida si la legalidad lo permite".
Asimismo, la delegada del Gobierno dijo que el altercado se produjo entre jóvenes que "probablemente acudían a participar en una manifestación comunicada por el partido Democracia Nacional y otras personas situadas en el polo ideológico opuesto".
Gallardón no consentirá la violencia
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha declarado hoy, sobre la muerte de un joven en un enfrentamiento entre grupos de neonazis y antifascistas, que no consentirá que en la capital "se instale la violencia, la intransigencia y la intolerancia".
"Quiero declarar, con toda la fuerza del mundo y con toda serenidad, que no vamos a consentir que Madrid sea una ciudad donde se instale la violencia, la intransigencia y la intolerancia. No vamos a tener una mirada indiferente ante acontecimientos tan graves", ha dicho el alcalde.
