Exteriores no encuentra personal de embajada para las 'zonas calientes'
El departamento de Moratinos lleva más de un año intentando cubrir dos puestos en las embajadas de Sarajevo e Islamabad
Según ha podido saber la Cadena SER el Ministerio de Asuntos Exteriores está teniendo problemas para cubrir puestos en plazas diplomáticas complicadas como Beirut, Islamabad, o Sarajevo. En el caso de la embajada en la capital bosnia y la embajada en Pakistán, el departamento que dirige Miguel Ángel Moratinos lleva más de un año intentando cubrir dos puestos allí que siguen sin adjudicar a día de hoy.
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Fuentes diplomáticas han confirmado a la SER que cubrir ciertos puestos en estas tres embajadas está resultando mas complicado de lo habitual. En el caso de la embajada de Bosnia el puesto a cubrir, de secretario auxiliar de embajada, se ha convocado desde el verano de 2006 hasta en tres ocasiones, quedando desierto en todos los casos. El puesto de jefe de negociado de visados en Pakistán, en Islamabad, también se ha convocado en dos ocasiones, desde diciembre de 2006, y también ha quedado sin adjudicar en todos los casos. El de secretario auxiliar en Beirut, en el Líbano, el puesto acaba de cubrirse pero lleva convocándose, quedando desierto dos veces desde septiembre de 2006.
Fuentes diplomáticas señalan que desde el 11-M, el personal funcionario que habitualmente concurre a estas convocatorias "ha empezado a plantear reticencias a los destinos en zonas calientes sintiéndose más que nunca en el disparadero". Estos puestos son de libre designación, por que la quedar desiertos evidencian o bien que no se han presentado suficientes candidaturas o que el departamento de Moratinos no ha conseguido que nadie haya dicho que sí al ser propuesto para cubrirlo.
En el caso de Sarajevo, el personal diplomático teme que la plaza pueda calentarse por contagio, ante la anunciada independencia de Kosovo. Ya caliente está en Líbano, con un vacío de poder que se prolonga sin remedio, y en Pakistán, donde continua el estado de emergencia y el Ejército comienza a perder posiciones frente a los milicianos de Al Qaeda y los talibán en la frontera del país con Afganistán.
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores reconoce problemas para cubrir estas plazas, aunque afirma que la vocación del Ministerio es encontrar candidatos de inmediato para que dejen de quedar vacantes "en el corto plazo".