Al menos 200 niños enrolados en la Policía de Afganistán
La Comisión de DDHH de Afganistán ha denunciado que algunos incluso sufren abusos sexuales
La Policía Nacional Afgana (ANP), varias milicias que la apoyan y compañías privadas de seguridad tienen reclutados a al menos 200 menores, algunos de los cuales son víctimas de abusos sexuales, según declaró hoy el líder de la Comisión Independiente de Derechos Humanos de Afganistán (AIHRC), Abdul Qader Noorzai, que representaba a las autoridades provinciales y de Derechos Humanos de Kandahar, en el sur de Afganistán.
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Noorzai desveló que "los niños son utilizados para diferentes propósitos" y que la mayoría de ellos experimenta "abusos sexuales". "Otros hacen todo tipo de trabajos como cocinar, limpiar, patrullar e incluso luchar", precisó. El líder de la AIHRC, además, relató que en al menos dos incidentes diferentes, en agosto y septiembre, despidió a algunos niños, aunque no a sus superiores, enviándoles "a sus casas" e instándoles a que se mantuvieran "alejados del personal militar", según informó la agencia de noticias de la ONU, IRIN.
Algunos niños son reclutados por las milicias locales, que reciben dinero del Gobierno para complementar la labor de la Policía en las provincias del sur del país, con fines militares y no militares. Apenas existe documentación sobre el uso y abuso de menores en el frente, debido a la ausencia de mecanismos de organización y responsabilidad y a la naturaleza informal de estas fuerzas auxiliares.
Los niños se sienten atractivos
Las autoridades creen que estas contrataciones, fundamentalmente de menores entre 10 y 17 años de edad, se llevan a cabo debido a la pobreza y al desempleo existente en Afganistán. Además, los menores se sienten especialmente atractivos por el hecho de llevar armas.
El jefe de la Policía de Kandahar, Said Aqa Saqib, declaró que en los últimos nueve meses varios funcionarios de la Policía han sido despedidos, reubicados u objeto de otras medidas disciplinarias por haberse descubierto que los niños eran sus inmediatos subordinados. Saqib aseguró que la Policía se toma el asunto "muy en serio" y que "no volverá a suceder".
Compañías privadas de seguridad
Aparte de la Policía afgana, los menores también han trabajado para compañías privadas de seguridad, en especial en las provincias de Kandahar y Helmand, en el sur, según confirmó un representante del Gobierno: "Los contratantes de la seguridad privada y de la Policía auxiliar utilizan niños sin que el Gobierno y la AIHRC tengan los medios suficientes para controlarlo".
Tanto el representante del Gobierno como Noorzai reconocieron que hasta fechas recientes la Policía auxiliar y las compañías privadas de seguridad habían permanecidos inmunes a controles por parte del Gobierno o la Policía. Al menos dos compañías de seguridad no gubernamentales rechazaron realizar comentarios acerca del asunto e impidieron la visita que IRIN pretendía hacer a su cuartel general.
Niños insurgentes
La Policía también acusa a los talibán y a otras facciones antigubernamentales de utilizar deliberadamente a niños con propósitos militares e ilegítimos. Aseguran que los talibán usan a niños como soldados y les obligan a cometer actos de violencia.
El portavoz de UNICEF Patrick McCormick acusó a los rebeldes talibán de usar niños para un ataque suicida al Ejército Nacional afgano en la provincia de Ghazni, en junio de 2007. McCormick mostró su preocupación por el "creciente uso de niños en tiempos de conflicto". Además, según el Departamento de Estado norteamericano, un vídeo difundido por la facción talibán mostraba cómo unos adultos ayudaban a un niño a decapitar a un adulto anti talibán.
Entre abril de 2003 y junio de 2006, unos 7.500 niños soldado tomaron parte en los programas de Desarme, Desmovilización y Reintegración (DDR) del proceso de reconstrucción post talibán en Afganistán, según los datos de la ONU.