Un hombre confiesa haber matado a toda su familia en Austria
El presunto asesino de su esposa, su hija, sus padres y su suegro, asegura que lo hizo para "ahorrarles la humillación" porque estaba arruinado
Un hombre de 39 años ha confesado haber matado en las últimas 24 horas a su esposa, a su hija, a sus padres y a su suegro, según ha informado hoy la policía en Viena. El sospechoso se ha entregado esta madrugada a la policía y ha confesado haber acabado con sus vidas en la casa familiar, en un barrio acomodado de la capital austríaca, según la emisora pública ORF. El hombre ha declarado que estaba arruinado, que había perdido una gran cantidad de dinero y que había matado a su familia para "ahorrarles la humillación", según han informado a la prensa fuentes policiales.
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El hombre se presentó en la comisaría en "estado de confusión" y anunció a los agentes de turno: "en mi piso yacen mi mujer y mi hija muertas". El arma homicida fue descubierta en el asiento trasero de su vehículo.
Los agentes encontraron los cadáveres de la mujer y la niña en el apartamento de la familia, mientras que los cuerpos sin vida de los padres fueron hallados en la localidad de Ansfelden, en Alta Austria, y la de su suegro en Linz, la capital de ese Estado.
El sospechoso trató de suicidarse pero falló en su intento de ahorcarse, según el director de la seguridad pública de Alta Austria, Alois Lissl.
El responsable de seguridad ha dicho en declaraciones a la agencia de noticias APA que los ataques fueron "especialmente crueles", ya que el agresor atacó con el hacha la cabeza de sus víctimas.
El relato de un horror
La policía ha encontrado varias cartas del agresor, en las que éste se disculpa por lo sucedido, aunque la policía sigue sin conocer los motivos reales de este crimen.
Después de matar a su esposa e hija, el sospechoso viajó a Ansfelden, donde quitó la vida primero a su madre en la entrada de su casa y luego a su padre, que estaba dormido en el sofá del salón de la vivienda.
A continuación, el hombre se trasladó a Linz, a pocos kilómetros de Ansfelden, donde atacó y mató a su suegro, relató Lissl.