Alertan de una probable "explosión migratoria" si no se ataja el alza del precio de los alimentos
Esta advertencia se ha lanzado en Burkina Faso por parte de representantes de los 24 países africanos que se dan cita en este encuentro de expertos en la lucha contra la inmigración irregular
Una mujer con su pequeño hijo en brazos trabaja en una huerta que gestionan un grupo de mujeres de la zona, dentro de un proyecto de Cruz Roja del Programa de Seguridad Alimentaria en Borginde en la provincia de Soum al norte de Burkina Faso.(JUAN MEDINA)
Si no se frena a tiempo la crisis humanitaria que se está generando en África por el aumento del precio de los alimentos se puede producir una auténtica "explosión migratoria" hacia Europa. Es la seria advertencia que han lanzado en Burkina Faso tanto representantes de los 24 países africanos que se dan cita en este encuentro de expertos en la lucha contra la inmigración irregular como altos dirigentes europeos en la voz del consejero del ministerio de inmigración francés Patrick Steffanini, cargo equivalente al de la secretaria de estado de inmigración en España.
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Steffanini ha asegurado que si no se garantiza a corto plazo la alimentación en estos países de origen de la inmigración a precios no onerosos es evidente que esto va a motivar que la inmigración clandestina aumente mucho más.
Lo que ya venían advirtiendo organismos internacionales como la FAO o el FMI ha quedado refrendado por primera vez en voz alta por representantes gubernamentales y policiales de medio centenar de países africanos y europeos reunidos en Uagadugú, la capital del antiguo Alto Volta. En representación de los países africanos Youseff Amrani el director de relaciones internacionales de la cancillería marroquí insistía además en que "no tardaremos mucho en comprobarlo" porque esta crisis alimentaria ya está afectando de lleno a los países más pobres del África central y occidental y ante el hambre la salida lógica es la búsqueda de medios de subsistencia en otros lugares.
En este sentido una de las intervenciones más contundentes ha sido la del ministro de cooperación de Burkina Fasso que echando mano de un proverbio burkinabe "oveja muerta no tiene miedo al cuchilllo" ha recordado a todas las delegaciones europeas que con por muchas patrulleras que se pongan a vigilar las costas o por muchas leyes para expulsar a los clandestinos que se arbitren "con la degradación súbita y brutal que se ha producido en toda el África subsahariana es imposible frenar la necesidad de emigrar que tienen los jóvenes para ayudar a sus familias". Además ha criticado que en Europa existan también redes organizadas que se lucran de la llegada de inmigrantes irregulares "a los que explotan y extorsionan" en la economía sumergida.
España se libra de críticas de los países africanos hacia Europa
El representante marroquí y la delegación senegalesa han puesto como ejemplo en todo momento a España como el modelo a seguir por los países europeos en materia de regulación de los flujos migratorios. Youseff Amrani ha asegurado que España ha sabido tender una red de puentes en las relaciones con los países africanos que ahora mismo no tiene ningún país europeo que sólo piensan en aplicar medidas de castigo y policiales a los inmigrantes sin ninguna medida para potenciar la llegada de trabajadores desde África de manera legal.
Amrani advierte a Europa en nombre de los 24 estados africanos que participan en esta reunión de Burkina que "nadie puede pretender solucionar sólo el problema de la inmigración clandestina, ni considerándola delito ni haciendo directivas de expulsión" porque toda solución a este fenómeno pasa por una colaboración conjunta entre los países de ambos continentes.
Por su parte, el segundo de a bordo del ministerio de inmigración francés Patrick Steffanini ha mostrado su total sintonía con la delegación española que ha defendido una política de lucha contra la inmigración irregular "sin complejos y determinante" palabras de la intervención en el plenario del portavoz de la delegación española Pedro Martínez, consejero del ministerio de Asuntos Exteriores para Oriente Próximo y África.
El más observado el italiano que ha pedido menos debates y más resultados concretos de estas cumbres aunque con un tono mucho más suave que el expresado estos días por sus ministros bendiciendo que gracias a la llegada de trabajadores inmigrantes ha crecido en gran medida la economía transalpina en los últimos años.
