Las FARC habrían cobrado unos 12 millones de euros por el rescate de Betancourt; Francia lo desmiente
Una fuente "fiable" cercana a los acontecimientos dice a una radio suiza que la transacción fue iniciada por Estados Unidos
Suiza
Dirigentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) habrían cobrado millones de dólares para liberar a su rehén Ingrid Betancourt y los otros 14 secuestrados, ha afirmado hoy a una radio suiza una fuente cercana a los acontecimientos. Francia se ha apresurado a negar que haya pagado ningún rescate para liberar a Betancourt.
Según la Radio Suisse Romande (RSR), la fuente es la esposa de uno de los guardias de los secuestrados que ha servido de intermediario de la transacción, después de ser arrestada por el Ejército colombiano. Al reintegrarse al seno de las FARC, ella ha logrado que su esposo cambiara de bando, según ha explicado la radio.
Más información
- Betancourt se entrevistará hoy con Sarkozy
- Ingrid Betancourt en la SER: "No tiré la toalla, acepté que podía morir"
- EEUU no pagó "ni un dólar" por libertad de sus ciudadanos rehenes de las FARC
- El abuelo de un rehén de las FARC muere de un infarto tras conocer su rescate
- Chávez y Uribe prometen pasar página tras la crisis
"Los 15 secuestrados en realidad han sido comprados a un alto precio, por lo que toda la operación ha sido una puesta en escena", ha informado la Radio Suisse Romande (RSR) en su boletín de mediodía, al citar una fuente "fiable" cercana a los acontecimientos.
Según la radio, la operación se ha transado con los secuestradores por unos 20 millones de dólares (12,7 millones de euros) y ha agregado que Estados Unidos, que tenía a tres de sus nacionales entre los rehenes, fue "el origen de la operación".
La "puesta en escena" de la liberación de los rehenes permite, según la radio suiza, que el presidente Álvaro Uribe mantener su línea de excluir todo tipo de negociación con la guerrilla para liberar a los rehenes.
Betancourt, tres contratistas estadounidenses y 11 militares fueron rescatados el miércoles en una operación que el Gobierno colombiano denominó Jaque y que se estuvo preparando desde enero pasado.
