La crisis económica obliga a los jóvenes a volver a la casa de sus padres
Según un estudio del Consejo de la Juventud de Madrid, el 20% de los menores de 35 años, emancipados en los últimos dos años, deberán volver al hogar paterno
"Los jóvenes que no pueden hacer frente a los gastos de un piso se ven obligados a volver a casa de sus padres". Son palabras de Jaime Chapatte, presidente del Consejo de la Juventud de Madrid (CJCM). Según un estudio de la organización que preside, la temporalidad (35%), el paro (13,2%) y los sueldos bajos (la media, 18.000 ¤ brutos al año), son los problemas que, ahora con la crisis, están empujando a los menores de 35 años recientemente emancipados a volver al hogar paterno.
Si nos centramos en la Comunidad de Madrid, 48.000 jóvenes se han independizado en los últimos dos años. Según UGT, entre el 20 ó el 25% de esta cifra se planteará volver a casa o se verá abocado a hacerlo en los próximos meses. Continuando con datos de los sindicatos, de los 710.000 jóvenes por debajo de los 35 años que han abandonado el hogar familiar, la mitad sigue necesitando ayuda de sus padres para poder sobrevivir.
Los efectos de la crisis, desde abril
La vuelta a casa de estos jóvenes al hogar paterno comenzó a hacerse patente en el segundo trimestre del año, según el Sindicato de Estudiantes. También CC OO ha alertado de este problema, que achaca a que "cuando se avecina la crisis, los primeros en caer son los contratos temporales, y los jóvenes son quienes más sufren estas contrataciones".
Mujeres y extranjeros, perjudicados
Llama la atención el dato de que el paro afecta a un 14 por ciento de las mujeres menores de 30 años y aumenta hasta un 18,3 por ciento en el caso de los hombres extranjeros no comunitarios. De hecho, el informe augura un aumento del paro entre los extranjeros no comunitarios que trabajan en la construcción (actualmente un 40,5 por ciento).
Más de tres meses para encontrar trabajo
Por otra parte, el estudio destaca que un 41,2 por ciento de las personas que buscan empleo invierten más de tres meses en obtenerlo, mientras que el 6,1 por ciento tarda más de un año. Además, la temporalidad en la contratación ha aumentado del 39,3 por ciento, al cierre del primer trimestre de 2007, hasta el 42,1 por ciento de este año.
Las jóvenes madrileñas que trabajan en el sector público, según el informe, son las que se ven más afectadas por los contratos temporales.




