Zapatero se compromete estudiar los estímulos fiscales para reactivar la economía
Está previsto que se creen grupos de trabajo y que celebrar una segunda cumbre en Londres
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió en Washington, durante la cena con la que comenzó la cumbre del G-20, a estudiar un plan de estímulos fiscales coordinado con otros países desarrollados para reactivar la demanda y la actividad económica.
Fuentes de la delegación española informaron del desarrollo de la cena ofrecida por el presidente estadounidense, George W. Bush, en la Casa Blanca, que Zapatero pisaba por primera vez.
Bush le recibió en español con su ya conocido "hola, ¿qué tal amigo?", para pasar después al inglés, darle la bienvenida y agradecerle que hubiera acudido a la cita.
Una velada agradable
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Zapatero, según la delegación española, pasó una velada "agradable", en la que intervino ante los jefes de Estado y de Gobierno del G-20 para reclamar medidas destinadas a la "economía real", una vez adoptadas iniciativas coordinadas para ayudar a la "economía financiera".
En este contexto, destacó la necesidad de estimular la demanda y estuvo de acuerdo en estudiar la posibilidad de "un plan de estímulo financiero a nivel mundial", una de las iniciativas puesta hoy sobre la mesa por varios de los dirigentes del G-20.
Zapatero consideró que los últimos veinte años han sido los mejores de la economía mundial, tanto por el crecimiento económico experimentado, como por el nivel de ahorro, y estimó que la crisis del sistema financiero ha derivado en un "estancamiento total".
Respaldo al borrador de la cumbre
Según sus palabras, han fallado los mecanismos de regulación y de supervisión, pero "los fundamentos de la economía no son malos y de esta situación se puede y se debe salir".
Para ello, se necesitan medidas coordinadas entre todos los países.
El Gobierno español respalda así el borrador de conclusiones de la cumbre, que todavía no está cerrado ya que hay países que han mostrado discrepancias con varios de sus puntos.
El primer apartado del texto, según las fuentes del Ejecutivo español, establece que los responsables de la crisis financiera no sólo son los actores del sistema, sino también los políticos y la falta de regulación existente en algunos países.
El borrador reconoce la importancia de las medidas coordinadas tomadas a corto plazo para paliar la crisis, pero hace hincapié en la necesidad de impulsar la demanda mundial, para lo que proponen "una política fiscal y monetaria expansiva".
Se apuesta además por reforzar los instrumentos de supervisión en cada país y de forma coordinada, dado el calado de las operaciones trasnacionales; y se aboga por avanzar en la Ronda de Doha.
El texto en estudio incluye una defensa de la globalización y del libre comercio y previene contra la tentación de caer en un proteccionismo excesivo y en una "sobrerregulación" al tomar medidas frente a la crisis.
Grupos de trabajo y más cumbres
Estas propuestas, según explicaron las fuentes de la delegación española, deberían definirse en varios grupos de trabajo antes de finales de marzo, cuando está previsto celebrar una segunda cumbre en Londres.
Aunque todavía falta por definir la participación española en esos grupos de trabajo, Zapatero está convencido de que su país continuará en el proceso de reforma del sistema financiero.
En la cena de este viernes estuvo sentado finalmente entre la canciller alemana, Angela Merkel, y el ministro de Finanzas de Holanda, ya que el primer ministro de ese país, Jan-Peter Balkenende, abandonó Washington sin acudir a la Casa Blanca tras recibir la noticia del fallecimiento de su padre.