Sociedad

Una mujer muerta y siete heridos en una aglomeración en la frontera de Melilla

Una vez superado el puesto fronterizo marroquí, se ha caído al suelo y ha sido pisoteada por la aglomeración

Una mujer de nacionalidad marroquí ha fallecido esta mañana como consecuencia de las lesiones sufridas cuando intentaba acceder a Melilla a través del control fronterizo de Barrio Chino.

Según fuentes policiales, los hechos se han registrado cuando un grupo de unas trescientas a cuatrocientas personas se han aglomerado ante los tornos de entrada del control policial español, quedando una mujer tendida en el suelo sin conocimiento al ser arrollada por la multitud.

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En este instante, un policía procedió a realizar dos disparos al aire para dispersar a la muchedumbre y así poder acceder a la mujer. Al comprobarse que respiraba con dificultad se pidió la presencia inmediata en la zona de una ambulancia, desplazando el 061 una UVI móvil, cuyo personal estuvo practicando los primeros auxilios a la herida por espacio de una hora en el interior de vehículo sanitario sin poder evitar que entrara en parada cardiorrespiratoria.

A las nueve menos cuarto de la mañana, y por disposición del médico forense, el cadáver fue trasladado al hospital Comarcal.

En el suceso también han resultado heridas siete personas por contusiones que han sido trasladadas al Hospital Comarcal

Todos los días se realizan una media de 20.000 pasos de porteadores que trasladan los fardos de mercancías de Melilla a Marruecos.

Estos pasos se venían realizando por el puesto fronterizo de Beni Anzar, pero desde este verano, las autoridades marroquíes habían dictaminado que el comercio de porteadores se trasladaba a la zona de Barrio Chino, debido a las obras de remodelación que Marruecos estaba llevando a cabo en su frontera principal.

La mercancía , consistente en todo tipo de artículos de primera necesidad, se reparte en fardos que llegan a pesar hasta ciento ochenta kilos. Los porteadores, realizan colas para hacerse con estos bultos, y pasarlos al otro lado a través del puesto fronterizo designado. Cada viaje supone para el porteador un pago que oscila desde los veinte euros por los bultos más grandes que llevan rodando, hasta cinco euros los más pequeños que suelen pesar entre cincuenta y setenta kilos y que son portados a la espalda. La mayoría de los porteadores son mujeres.