Más de 2.000 personas asisten al funeral por los cuatro niños muertos en Sant Boi

Más de 2.000 personas han asistido en el municipio barcelonés de Sant Boi al funeral por los cuatro niños que murieron el pasado sábado. El techo del pabellón deportivo que se cayó debido al fuerte temporal de viento también hirió a otras nueve personas, siete niños y dos adultos. Dos de los siete niños han sido dados de alta, mientras que el resto permanecen estables, según han informado fuentes hospitalarias.

El suceso de Sant Boi ha sido la peor tragedia provocada por el temporal de viento que azotó España, principalmente el norte, dejando un saldo de 12 muertos, siete de ellos en Cataluña. Uno de los adultos, hospitalizado en Bellvitge, ha sido trasladado a planta tras mejorar de las heridas. Otro adulto que está ingresado en el Hospital del Mar, se halla hospitalizado tras ser operado de una fractura de tibia y otra de tobillo.

"Toda la población se encuentra de luto por esta tragedia, una de las peores vividas por Sant Boi. Estamos todos muy afectados", ha declarado el alcalde de la ciudad, Jaume Bosch, en la página web del ayuntamiento. Los cuatro pequeños murieron al derrumbarse sobre ellos parte del muro de un pabellón deportivo, después que el fuerte viento arrancara la techumbre de la instalación donde se habían refugiado del fuerte temporal.

El luto de una localidad

El obispo de Sant Feliu de Llobregat, Agustín Cortés, ha oficiado la ceremonia en el polideportivo La Parellada de Sant Boi, a la que ha asistido el presidente de la Generalitat, José Montilla, la ministra de Defensa, Carme Chacón, y el conseller de Interior, Joan Saura, así como otras autoridades locales y comarcales.

Durante la homilía, el obispo ha recordado a las familias de las víctimas que no están solas y que toda una ciudad comparte su dolor, y ha querido dar "esperanza y fuerza" a las familias destrozadas por el dolor.