Pepinos, judías y tomates acusan el temporal de nieve

El pepino holandés, la judía y el tomate son especialmente sensibles al frío. La producción ha caído un 50% en Andalucía. En Jaén , el peor parado es el sector del olivar. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha denunciado que el temporal de viento, lluvia y nieve, con desbordamientos de ríos incluido, ha dañado fundamentalmente las cosechas de cítricos y hortalizas en Murcia y Valencia, los cultivos herbáceos e industriales de Navarra, Aragón y Cataluña y las plantaciones forestales de Galicia, Cantabria y País Vasco.

Todavía es pronto para conocer el impacto económico del temporal porque sigue haciendo frío y los agricultores no han cerrado el balance de daños, según ha explicado un portavoz de la organización. Los daños van a estar cubiertos por el seguro, ha asegurado.

En Andalucía las provincias más afectadas han sido Granada, Jaén y Huelva. En la primera se han producido algunos daños puntuales en estructuras de invernaderos. Además, las hortalizas y otros cultivos de temporada se están viendo afectados por el frío, y se está registrando una notable bajada de la productividad. Dichas caídas son de un 50% en la producción de pepino holandés, judía y tomate (ensalada y cherry), tres producciones especialmente sensibles al frío.

En Jaén, el temporal está causando bastantes pérdidas en el sector del olivar. No sólo está retrasando la recolección, que ahora está parada, y la gente no está pudiendo salir al campo a trabajar, sino que el viento y la lluvia ha hecho que caiga mucha aceituna al suelo.

En Huelva las lluvias han provocado el retraso en la campaña de fresa. Por su parte, las frambuesas sufrieron bastante con la ola de frío, ya que se perdieron en torno a 4.000 kilos por hectárea.

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En Aragón, el fuerte viento ha provocado pérdidas en el campo, especialmente en el cultivo del maíz y en instalaciones agrícolas y ganaderas. Según COAG, en esta campaña, a estas alturas de ciclo vegetativo, todavía queda mucho cereal de primavera por cosechar debido a la humedad y a su bajo precio, causas que han retraído a los agricultores a realizar su recolección.

Las instalaciones también se resienten

Además, invernaderos, tejados, vallas, cortavientos, respiraderos de granjas, placas solares, paredes de naves y granjas, etc. han sido levantados o abatidos por la fuerza del viento, ocasionando graves pérdidas en el sector. También muchos árboles frutales han resultado afectados, al desgajarse sus ramas o al ser arrancados de raíz.

En Murcia, el viento, especialmente en la comarca del Campo de Cartagena, ha dañado un buen número de estructuras de invernaderos dedicadas esencialmente al pimiento y se ha perdido el plástico en muchos más. Miles de kilos de naranja Navelate, que ahora mismo estaba en plena recolección, han acabado en el suelo.

En la Comunidad Valenciana han caído al suelo las producciones de variedades tardías y de media estación que aún no se habían recogido. La falta de precio para los cítricos ha provocado que muchos agricultores hayan optado por retrasar la recolección y ahora esa producción se ha visto afectada por las adversas condiciones climáticas.

En Cataluña, un 75% de los cultivos herbáceos de las comarcas ilerdenses de L''Urgell, Pla d''Urgell, La Noguera y Segrià están afectados, así como los cultivos de invernaderos en el Baix Llobregat y Tarragona, con daños en otras instalaciones, como cubiertas de granjas y de almacenes agrícolas.

En Galicia, los daños en unas 40.000 hectáreas de cultivos forestales por el viento se valoraron en más de 100 millones de euros, con temor al hundimiento de precios de la madera. También hubo daños en ganadería por la falta de suministro eléctrico en la zona norte durante un tiempo excesivo.