El mapa de otro Madrid en 'Milenio 3'

Carlos Cala nos introduce una noche más una historia de verdadero misterio. Una vez más el corazón viejo y apretado de Madrid ha dado una sorpresa, las obras y las excavaciones al final se encontraron con huesos humanos, osamentas perdidas que quizás guardan el secreto de una antigua historia. De inmediato, los historiadores y cronistas hablan de un antiguo convento incendiado o un camposanto clandestino, ambos elementos son un reflejo cotidiano del pasado de la capital.

Y es que Iker Jiménez tiene clara la imagen en su cabeza, es esa que nos intenta transmitir: la de las excavadoras en una obra aquí en la capital de España. Estas excavadoras nos llevan al Congreso de los Diputados. Debajo de este edificio hubo un antiguo convento que fue incendiado en numerosas ocasiones.

Muchos de los edificios eclesiásticos españoles fueron quemados por revueltas populares, por accidente o quién sabe por qué motivos. Pero el caso es que luego se encuentran restos y también pasan 'cosas'. Y es que la historia de Madrid está cuajada de misterio.

Hubo un antes del Congreso de los Diputados

Se habla de que se han encontrado dos cráneos muy antiguos debajo del edificio, que quizás sólo sea el ejemplo de que Madrid está 'preñado' de huesos. Para hablar de ello 'Milenio 3' cuenta con el experto Ángel del Río, que nos cuenta que está por averiguar su procedencia, y es que no es de extrañar esta aparición en los lugares donde ha habido un convento, ya que hasta la época de José Bonaparte se enterraba en las iglesias y en los patios anexos. Fue José Bonaparte quién ordenó que se cambiara esta práctica por los cementerios que conocemos. Así, en lo que hoy es el Congreso de los Diputados hubo un convento llamado del 'Espíritu Santo' o convento de San José y cuya iglesia se construyó en 1648. Se ha constatado, y también que allí hubo enterramientos.

Éste convento se fundó en la calle Caballero de Gracia, después los monjes se trasladaron a la Carrera de San Jerónimo y construyeron allí la iglesia y el convento. En 1823 sufrió un incendio que prácticamente lo destruyó por completo. Se reconstruyó en 1834 para albergar la reunión de las Cortes Generales, donde su iglesia se habilitó como salón de sesiones. Poco tiempo después, en 1841, fue declarado en ruinas y se derribó un año más tarde para que en 1850 se construyera el Congreso de los Diputados.

Finalmente parece que hay tres cuerpos que pertenecen a tres personas adultas y que se están estudiando en el Anatómico Forense. No se descarta la idea de que se descubran más restos.

En otros lugares de la ciudad

Hace unos años también aparecieron unos restos en la remodelación del centro de arte contemporáneo Reina Sofía, porque allí hubo también una iglesia y un cementerio.

Y es que en Madrid también hubo incendios que agredieron el patrimonio artístico durante la guerra civil y antes de ésta. Fue destruido también por el desarrollismo. Desaparecieron gran parte de las murallas y de las iglesias de Madrid.

Mucha gente en la capital vive sobre osamentas -probable inconscientemente-, sobre cementerios... Las obras de la puerta del Sol descubrieron los cimientos de la antigua iglesia del Buen Suceso, que fue enterrada por la construcción del Hotel París que lleva el famoso letrero de Tío Pepe.

'El milagro económico español'

En los años del desarrollismo -milagro económico español-, se hicieron barbaridades inconcebibles, se encontraron hallazgos y se taparon, por lo que hoy cabría la reflexión: ¿cuánta gente en Madrid vive sobre un osario?

Si recordamos el Galerías Preciados de Arapiles -hoy el Corte Inglés de arapiles-, allí también se encontraron restos. Sin embargo, otro lugar quizás aún más sorprendente es una estación de metro: la estación de Tirso de Molina.

Ésta es su historia: en lo que es la plaza había un convento de frailes que fue derruido para abrir la plaza. Eso se quedó en el olvido y en los años 20 se empezó a construir la línea 1 de metro y aquí se colocó la estación de Progreso, la actual Tirso de Molina. Las obras corrían prisa y los obreros un buen día se encontraron con un montón de restos humanos. El jefe de obra, ante la posibilidad de que el tiempo de la obra aumentase considerablemente, no tuvo más remedio que decidir amontonar todos los restos debajo de lo que hoy son los andenes, por lo que cada vez que uno que está ellos está literalmente encima de los cuerpos.

Más que un mapa

Son muchos los lugares en los que han sucedido casos de Poltergeist y que tras una investigación posterior se han encontrado cadáveres y cuerpos entre los escombros.

'Milenio 3' nos recuerda que Madrid está lleno de todos estos casos, de camposantos y de camposantos clandestinos.... Y es que cuando vamos a comprar una casa, muchas veces no somos conscientes de dónde descansamos.

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