Un fuerte terremoto en el centro de Italia deja más de 150 de muertos

Un terremoto de 6,3 grados en la escala Richter ha sacudido a las 3:32 de la mañana el centro de Italia, con epicentro en la región meridional de Abruzzo. El temblor se ha sentido desde la región de Emilia Romaña (norte) a la ciudad de Nápoles (sur). El balance es desolador: más de 150 muertos, decenas de desaparecidos, alrededor de 1.500 heridos y miles de evacuados, según informa "Il Corriere della Sera".

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Un balance que se aleja mucho del de esta mañana, cuando se hablaba de una docena de víctimas. Sin embargo, rápidamente ha estado claro que esa cifra estaba destinada a crecer con el paso de las horas: pronto han ido apareciendo cadáveres entre los escombros, personas que habían sido sorprendidas por el temblor mientras dormían.

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha decretado el estado de emergencia, movilizando el ejército, la aeronáutica y los carabinieri. Berlusconi que tenía previsto hoy una visita oficial a Moscú la ha anulado y se ha acercado a L'Aquila junto al ministro de Interior, Roberto Maroni, y el ministro de Ifraestructuras y Transporte, Altero Matteoli. El jefe de protección civil, que se ha acercado a la ciudad pocas horas después de que se produjese el terremoto, ha hablado de una "situación dramática, la peor tragedia de este inicio de milenio".

Tras su llegada a l'Aquila, Berlusconi ha tenido su primera rueda de prensa para dar un primer balance de la situación: "En el vuelo, he visto como mirase donde mirase había un derrumbamiento y al lado alguien que ayudaba. No se dejará solo a nadie", ha dicho el primer ministro.

Tanto Benedicto XVI como el presidente de la República, Giorgio Napolitano, han enviado un mensaje de solidaridad a la población que ha sufrido el seismo. Mensajes de condolencias le han llegado al país mediterráneo desde todos los rincones del mundo. La ciudad española de Cuenca, ciudad hermanada con la L'Aquila, se ha puesto a disposición de su Consistorio para brindar su apoyo y ha decretado Luto Oficial Municipal entre las 00.00 y las 24.00 horas del día 7 de abril, simbolizado por la bandera de la ciudad a media asta en el balcón del Ayuntamiento.

La Unión Europea y por supuesto España han puesto a disposición de Italia todos los medios que sean necesarios para colaborar en las labores de rescate. El presidente del Gobierno español, Zapatero, ha remitido a primera hora de la mañana un mensaje a Silvio Berlusconi trasladándole sus condolencias por lo todo lo ocurrido. Seguramente una de las peores tragedias que ha sufrido Italia en los últimos años.

Dramáticas cifras

Según la última actualización del balance difundido por fuentes hospitalarias, la cifra de víctimas es dramática, provisional y por desgracia, parece destinada a aumentar: al menos 150 muertos, centenares de heridos y cerca de 100.000 personas a la intemperie. Entre las víctimas hay al menos cinco niños. Protección civil también ha dado estos datos.

Para los evacuados, 70.000 según 'La Repubblica' y 100.000 según 'Il Corriere', se han abierto varios centros de acogida y se han creado unas 25.000 plazas entre albergues, campamentos y vagones de tren con literas que ha cedido Trenitalia.

Roberto Maroni ha asegurado que se encontrará una ubicación para los evacuados "rápidamente". El ministro de Interior ha explicado también que no hay problemas para los heridos: "Hay sitio suficiente, los que estaban graves han sido ya evacuados".

Para complicar más aún la situación de aquéllos que se van a ver obligados a dormir fuera de casa, alrededor de las ocho de la tarde ha comenzado a llover en diversas zonas de la región.

Paisaje derrumbado

El paisaje es desolador, con centenares de edificios derrumbados complentamente o en parte. Al menos 50.000 personas podrían tener dificultades para volver a sus casas y muchas de ellas se han quedado sin hogar. La zona más afectada ha sido la de L'Aquila, en la región del Abruzzo, donde numerosos edificios se derribaron, entre ellos la cúpula de la iglesia de las Almas Santas, en el centro histórico. La catedral también sufrió daños estructurales.

Los Bomberos de la zona se hallan inmersos en las tareas de rescate para sacar a las personas que habrían quedado atrapadas en los escombros de los edificios derrumbados, entre los que figura un alojamiento para estudiantes en el que también podrían haberse registrado víctimas.

Tras la sacudida, centenares de personas han salido a toda prisa a la calle, no sólo en L'Aquila sino también en otras localidades de la región como Pescara, Sulmona, Teramo o Chieti. Un italiano residente en la zona del terremoto que vive en la zona ha relatado a la SER que estaban durmiendo cuando "de repente se movía todo". Según sus propias palabras ha sido una "experiencia terrible".