Bridgestone entra en 'números rojos'
Por otro lado, Bridgestone ha revisado al alza sus <b>previsiones de pérdidas</b> para la primera mitad del año fiscal
El fabricante japonés de neumáticos Bridgestone registró unas pérdidas netas de 34.800 millones de yenes (253,4 millones de euros al cambio actual) durante el primer trimestre del año fiscal 2009-2010 (de abril a junio), en comparación con el beneficio de 22.900 millones de yenes (166,7 millones de euros) del mismo periodo de 2008, informó la compañía, que ha revisado al alza su estimación de pérdidas para la primera mitad del año.
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La empresa señaló que su resultado neto correspondiente al primer trimestre del presente ejercicio fiscal se vio afectado negativamente por la continuada caída de las ventas, provocada por la recesión internacional, y por el aumento de los costes fijos, a causa de los recortes de producción.
La cifra de negocio de la multinacional asiática se situó en 567.600 millones de yenes (4.134 millones de euros) entre abril y junio, lo que se traduce en una reducción del 29% en comparación con las cifras del mismo periodo de 2008.
Asimismo, el fabricante de neumáticos registró un resultado operativo negativo de 12.300 millones de yenes (89,5 millones de euros) en los tres primeros meses del año fiscal, frente al beneficio operativo de 52.400 millones de yenes (381 millones de euros) obtenido en el mismo periodo del ejercicio fiscal precedente.
Por divisiones, el área de Neumáticos de la empresa facturó 465.600 millones de yenes (3.391 millones de euros) en el trimestre fiscal, un 28% menos, y contabilizó unas pérdidas operativas de 7.300 millones de yenes (53,1 millones de euros).
La división de Productos Diversificados facturó 104.400 millones de yenes (760 millones de euros), un 31% menos, y sus pérdidas operativas fueron de 5.000 millones de yenes (36,4 millones de yenes).
Revisión de previsiones
Por otro lado, Bridgestone ha revisado al alza sus previsiones de pérdidas para la primera mitad del año fiscal. De esta forma, la empresa prevé registrar un resultado neto negativo de 62.000 millones de yenes (451 millones de euros), en comparación con la estimación anterior de 21.000 millones de yenes (152,9 millones de euros).
No obstante, la firma ha aumentado su previsión de facturación, que ha pasado de 1,19 billones de yenes (8.667 millones de euros) a 1,2 billones de yenes (8.739 millones de euros).
