El Supremo rebaja en dos años la condena a un hombre que mató a su esposa
La Justicia rebaja a 38 años la condena porque entiende que intentó reparar el daño causado a sus hijos
El Supremo rebaja en dos años la condena a un hombre que mató a su esposa, hirió gravemente a su hijo e intentó acabar con la vida de su otra hija.
Los Magistrados aceptan la atenuante de reparación del daño causado porque el acusado se ofreció a donar los órganos a su hijo y cedió una pensión de invalidez a la hija.
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El brutal crimen se produjo en el domicilio conyugal. El cabeza de familia cogió la escopeta y disparó a su mujer cuando estaba a menos de 30 centímetros de ella. Murió en el acto. Los hijos acudieron a la habitación pero su padre les recibió con más disparos. Uno de ellos alcanzó al varón en el costado. La hija logró arrebatarle la escopeta, aunque en el forcejeo posterior su padre casi la tira por la ventana.
El acusado fue condenado en instancia a 40 años de cárcel por el delito de malos tratos, el asesinato de su mujer, el intento de asesinato de su hijo mayor, el intento de homicidio a su hija. Ahora el Supremo rebaja a 38 años la condena porque entiende que intentó reparar el daño causado a sus hijos. Al varón porque envió una carta al hospital donde permaneció ingresado para ofrecerle sus órganos. A la mujer porque le cedió su pensión de invalidez para contribuir a su alimentación y además aceptó todo lo que le pedía en la demanda que presentó contra él.
La sentencia cuenta con un voto particular. El Magistrado Julián Sánchez Melgar considera que el ofrecimiento de órganos que hizo el padre fue meramente simbólico porque nada se materializó y sobre la manutención de la hija considera que es una obligación del acusado tanto si hubiera querido matarla como si no.
