Venía a curarse y acabó siete días encerrado en Barajas
La policía asegura que cumplió extrictamente la normativa europea que regula la entrada de extracomunitarios en el espacio Schengen y que le acabó concediendo el visado por razones humanitarias y a petición del consulado guineano.
Es la denuncia de Lucas Olo Hondo, ingeniero de 43 años, procedente de Guinea Ecuatorial. Este ingeniero y empresario de la construcción en su país ya había residido en España, de hecho tenía la residencia permanente hasta 2007, traía 14.000 euros en efectivo para pagar un tratamiento médico en una clínica madrileña pero acabo retenido una semana entera en la polémica sala de inadmitidos del aeropuerto de Barajas.
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Según el abogado, la policía de fronteras rechazó su entrada el 4 de febrero porque la residencia permanente se le había caducado y porque no traía visado. Según la portavoz de la jefatura de policía de Madrid este ciudadano carecía de permiso de residencia válido y de visado cuando llegó a Barajas y que fue a petición del consulado de Guinea Ecuatorial cuando se procedio a concederle por razones hunanitarias un visado de 15 días para permitirle que se le hagan las pruebas médicas. Finalmente pudo cruzar el puesto fronterizo el 11 de febrero.
El letrado de Lucas denuncia "la arbitrariedad" de la policía para rechazar a su cliente en un primer momento y dejarle entrar con los mismos requisitos que traía pero una semana después, con los problemas de salud añadidos que se le agravaron durante tanto tiempo en esa sala del aeropuerto madrileño. Además el abogado denuncia que los agentes no tuvieran en cuenta los mínimos valores humanitarios "por un lado no fueron sensibles al pésimo estado de salud que presentaba esos días Lucas pero finalmente fue clave para que la policía reconsiderara su decisión y también influyó por otro lado los errores que había por ejemplo en la fecha de devolución que se definía en el auto".
El letrado Gustavo Duguech asegura que al revisar el expediente pidió explicaciones a la policía de por por qué no se le había comunicado a su cliente que un juzgado de instrucción había autorizado su internamiento pasadas las 72 horas. Y de por qué en ese auto de internamiento aparecía por error como fecha para la devolución a Guinea el "13 de enero de 2008". Al final le concedieron un visado en frontera y ya está recibiendo tratamiento médico por tuberculosis, malaria y diabetes con un médico de gran prestigio en enfermedades tropicales en el hospital del Rey. Lucas asegura que se sintió humillado por el trato dispensado por la policía española. Sin embargo la versión de la policía es diferente, porque subrayan que el visado se le autorizó a petición del consulado guineano en Madrid
La semana que pasó del 4 al 11 de febero Lucas la define como "una estancia en la cárcel" ,donde cada día entraban " 40 o 50 inmigrantes a los que se les denegaba la entrada".Estaba tan mal físicamente que pidio que lo devolvieran el mismo día 4 a Malabo en el mismo vuelo en el que había venido a Madrid pero según Lucas la policía le dijo que no, que se iría el día 11.
El abogado experto en materia de extranjería Gustavo Duguech "lo que más pesó para que la policía reconsiderara finalmente su decisión y dejara entrar a este ciudadano guineano fue el agravamiento de su estado, posiblemente autorizaron su entrada por razones humanitarias". El letrado llama la atención además sobre el error en la fecha de devolucion a su país en el auto del juez que aludía a una enero de 2008. Hay que recordar que el Artículo 25 de la ley de extranjería permite este tipo de decisiones, fue el artículo que se argumentó por parte del gobierno español para permitir la entrada en España de la activista saharaui Aminetou Haidar tras ser expulsada de El Aaiun.
Lucas subyara una y otra vez que no vino a Madrid a buscar trabajo ni a quedarse aquí solo a recibir un tratamiento médico en el Hospital Carlos III y regresar a su país para seguir ganándose . Finalmente el 11 de febrero se le expide un visado en frontera y desde entonces ya está recibiendo atención médica y regresará en los próximos días a su país.
La política de inadmisión de extranjeros en los aeropuertos españoles lleva años marcada por la polémica. Numerosos gobiernos de América Latina han protestado reiteradamente por ello. Según los últimos datos 9215 extranjeros fueron inadmitidos en 2009 cuando intentaban entrar en España a través del aeropuerto de Barajas. La mayoría son latinoamericanos, unos 6000: Brasil 1902, Venezuela 1338, Paraguay 1050, Argentina 1254, y en menor medida uruguayos.