Internacional

Los líderes europeos encargan a Zapatero y Van Rompuy preparar propuestas para la cumbre del G-20

Los trabajos de la Unión Europea para la reunión de Toronto se centrarán en el fortalecimiento de la regulación y supervisión de grandes entidades financieras

El Consejo Europeo acordó este viernes encargar al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y al presidente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, preparar las propuestas que llevarán los 27 a la cumbre del G-20 que se celebrará los próximos 26 y 27 de junio en Toronto (Canadá), según informaron fuentes gubernamentales españolas.

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La iniciativa de que sean Zapatero y Van Rompuy quienes coordinen la posición de la UE de cara a la cita de Toronto partió del presidente francés, Nicolas Sarkozy, agregaron las fuentes. A la reunión del G-20 la Unión Europea acudirá con "una sola voz" aunque contará con "dos sillas", una para el presidente permanente del Consejo y otra para el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

España no es miembro del G-20 pero gracias a Sarkozy, que le cedió el asiento de Francia durante la presidencia gala de la Unión Europea, para que asistiera a la cumbre de Washington, en noviembre de 2008, Zapatero ha acudido a todas las citas convocadas desde entonces, la de Londres, en abril de 2009, invitado por el primer ministro británico, Gordon Brown, y la de Pittsburg (Estados Unidos) en septiembre de ese mismo año a invitación de Barack Obama.

Las mismas fuentes sostienen que España ha consolidado ''de facto'' su presencia permanente en las cumbres del G-20. Así, además de Toronto, el presidente del Gobierno viajará a Corea a finales de año para la siguiente cita del club de países más industrializados del mundo y economías emergentes.

Los trabajos de la Unión Europea para la reunión de Toronto se centrarán en el fortalecimiento de la regulación y supervisión de grandes entidades financieras, mayor transparencia en los mercados de derivados, especialmente en los seguros de la deuda de los países, y en fuentes de financiación innovadoras como una tasa mundial sobre transacciones financieras.

El pacto es una victoria clarísima para la Unión Europea