Hallan nueva especie homínido que vivió hace 2 millones de años en Sudáfrica
Ha sido hallada gracias a 'Google Earth'. La especie tenía <b>brazos largos</b>, manos fuertes y cortas, una pelvis muy avanzada y largas piernas capaces de caminar y correr como un humano
Dos fósiles encontrados en una cueva de Sudáfrica han resultado claves para explicar la evolución humana. Este descubrimiento histórico además se ha realizado en parte gracias a una herramienta tecnológica al acceso de cualquier usuario como es 'Google Earth'.
El descubrimiento, realizado por científicos de la Universidad de Witswatersrand, se trata de restos de al menos dos esqueletos de homínidos, conservados en buenas condiciones, que datan de entre 1,78 y 1,95 millones de años.
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Todo empezó en marzo de 2008, cuando el profesor Lee Berger de la Universidad de Witswatersrand, en Johannesburgo, decidió usar 'Google Earth' para ubicar varias cuevas y yacimientos fósiles identificados por él y por algunos de sus colegas durante las últimas décadas.
Yacimientos y cuevas desconocidos
Además, según informó el gigante estadounidense, el uso de 'Google Earth' le permitió localizar nuevos fósiles aprendiendo a identificar el aspecto que presentan los yacimientos en las imágenes tomadas por satélite.
Al principio del proyecto había aproximadamente 130 cuevas conocidas en la región y alrededor de 20 yacimientos identificados. El profesor Berger pudo descubrir casi 500 cuevas y yacimientos desconocidos hasta el momento, incluso teniendo en cuenta que este área es una de las más exploradas de África.
Uno de estos yacimientos ha dado lugar al gran descubrimiento de una nueva especie, la 'Australopithecus sediba', que ya caminaba erguida y que compartió muchos rasgos físicos con las primeras especies del género homo. Por ello, su incorporación en el registro de fósiles puede dar respuesta a algunas preguntas sobre nuestros antepasados en África.
Bien conservados
Sus características implican que la transición de los primeros homínidos al género Homo se produjo en fases muy lentas, con varias especies similares a los Homo que aparecieron antes.
Según explica Lee Berger, de la Universidad de Witwatersrand: "Esta nueva especie comparte más características derivadas con los Homo iniciales que cualquier otra especie de australopithecus conocida y por ello representa un posible ancestro del género o un grupo hermano de un ancestro cercano que persistió durante algún tiempo después de la primera aparición del 'Homo'".
Los científicos descubrieron los dos esqueletos parciales en depósitos de una cueva en Malapa, Sudáfrica, y analizaron los restos, entre los que se incluían la mayor parte de un cráneo, la pelvis y el tobillo de la nueva especie. Los dos individuos, una hembra adulta de entre 28 y 32 años y un varón joven de entre 10 y 13 años, y fueron encontrados juntos en una parte del sistema cavernario que se había mantenido protegida de los animales carroñeros, por lo que se encuentran bien conservados.
Su aspecto
La especie tenía brazos largos, como un simio, manos fuertes y cortas, una pelvis muy avanzada y largas piernas capaces de caminar y correr como un humano, además es probable que hubiera podido escalar.
"Se estima que tenían alrededor de 1,27 metros, aunque el niños podría haber crecido más. La hembra probablemente pesaba 33 kilogramos y el niño unos 27 kilogramos en el momento de su muerte. El tamaño del cerebro del joven era de entre 420 y 450 centímetros cúbicos, lo que es pequeño, en comparación con el cerebro humano que alcanza entre los 1.200 y 1.600 centímetros cúbicos, pero la forma del cerebro parece ser más avanzada que la de los australopithecus", explica Berger.
Los investigadores describen las características físicas de los homínidos, subrayando las especiales características de la pelvis y los dientes pequeños que comparten con las primeras especies ''Homo''. Según sus físico, los autores sugieren que la nueva especie descendía del ''Australopithecus africano'' y que la apariencia del homínido manifiesta los inicios del caminar y correr más eficaz en términos energéticos.
Los orígenes humanos
El nombre 'sediba' significa ''fuente'' o ''manantial'' en el lenguaje Sotho que se habla en Sudáfrica y los investigadores creen que los nuevos fósiles podrían proporcionar una rica información sobre los orígenes humanos. Por el momento, estos nuevos fósiles dejan claro que la transición evolutiva de los ancestros de cuerpos pequeños, y quizás habitantes de los árboles, hacia los cuerpos de mayor tamaño y bípedos se produjo en fases graduales.
"Estos fósiles nos proporcionan una detallada visión de un nuevo capítulo de la evolución humana y suponen una ventana a un periodo crítico en el que los homínidos realizaron el cambio de la dependencia de la vida en los árboles a la vida en la tierra. El 'Australopithecus sediba' parece presentar un mosaico de características que le muestran como un animal cómodo en ambos mundos", añade Berger.