La CECA elige a Fainé como presidente de la patronal de las cajas
El consejo de administración de la CECA ha elegido como nuevo presidente a Isidro Fainé, máximo responsable de La Caixa. Amado Franco será uno de los vicepresidentes
Isidro Fainé, máximo dirigente de La Caixa, será el nuevo presidente de la CECA en pleno proceso de reestructuración de las cajas de ahorros españolas al que dentro de poco tiempo se le sumará una reforma de la ley estatal que rige al sector en la segunda mitad del año.
El presidente de ''la Caixa'', Isidro Fainé, ha sido elegido por unanimidad nuevo presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros, tras la reunión del consejo de administración celebrada este martes.
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Fainé, que ha encabezado una candidatura única consensuada por todas las cajas, sustituye a Juan Ramón Quintás, quien presentó su dimisión en el encuentro del máximo órgano de gobierno de la patronal de las cajas celebrado en Sevilla el pasado 17 de marzo.
Las cajas de ahorros adoptaron esta decisión por unanimidad y el nuevo presidente de la CECA será ratificado mañana en la asamblea de la institución. Por su parte, el presidente de Ibercaja, Amado Franco, que fue el primero en postularse para relevar a Quintás, ha sido nombrado vicepresidente primero.
De esta forma, la comisión ejecutiva queda compuesta por el presidente Isidro Fainé, los vicepresidentes Amado Franco, Rodrigo Rato (Caja Madrid), Braulio Medel (Unicaja) y Modesto Crespo (CAM). El secretario es Carlos Egea (Caja Murcia) y como director general de la CECA sigue José Antonio Olavarrieta.
Además el consejo de administración acordó nombrar por unanimidad a Juan Ramón Quintás, presidente de honor, y proponer a la asamblea general que le conceda la medalla al mérito en el ahorro.
El nuevo presidente deberá comenzar a trabajar desde mañana en la reestructuración de las cajas de ahorro, que, hasta ahora, han rubricado entidades como CCM y Cajastur, las cajas catalanas, Caja España y Caja Duero y las cajas que integran Banca Cívica.
El sector ya descuenta que al menos la mitad de las cajas deberán integrarse y dejar una nueva red fuerte, con menos de 30 entidades, y capaz de competir. Sin embargo, en su fortaleza no sólo influirá la propia reordenación, sino también las nuevas exigencias de capital.
Además, el segundo semestre del año podría incorporar de nuevo en la agenda de las cajas un debate aparcado desde hace años y que las propias entidades consideran prioritario: la reducción del peso político en los consejos de administración, que implica una modificación de la Ley Orgánica de las Cajas de Ahorro (Lorca).
De hecho, el Gobierno no quiere que haya cargos electos en los consejos de administración y asambleas de las cajas de ahorros, aunque aún no ha realizado ninguna propuesta en este sentido a los grupos políticos, y prevé acometer una reforma de la Lorca a partir del segundo semestre del año, cuando haya finalizado la reestructuración financiera.
- <a name="despiece1"></a>Perfíl de Isidro Fainé