Girona rechaza prohibir el 'burka' en espacios públicos de la ciudad
Se convierte en la única capital de provincia catalana en oponerse a la regulación contra el velo integral
El pleno del Ayuntamiento de Girona ha tumbado este lunes la moción presentada por el PP sobre la prohibición de los velos integrales -burka y niqab- tanto en la vía pública como en los edificios y equipamientos municipales. El Gobierno tripartito votó en contra, mientras que los populares y CiU votaron a favor, aunque no sumaron suficiente para conseguir que prosperara.
Con 16 votos en contra y siete a favor -el pleno normalmente lo forman 25 concejales, pero faltaban dos-, PSC, ERC e ICV dijeron no a prohibir el uso de los velos integrales en la ciudad.
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Principalmente, según detalló la concejal socialista, Lluìsa Faxedas, "porque no es competencia de los ayuntamientos prohibir su uso en la vía pública". Por ello, instó a que esto se debatiera en el Parlament de Cataluña o en las Cortes Generales.
La portavoz del grupo municipal del PP, Concepció Veray, mostró su sorpresa ante la negativa del tripartito, sobre todo después de que en otras ciudades como Lleida, Tarragona o la capital catalana, se haya decidido no permitir el uso del ''burka'' y el ''niqab'', con el voto a favor de socialistas y republicanos.
Los diferentes grupos calificaron a los populares de "intencionalistas, oportunistas y electoralistas", a lo que Veray respondió con una pregunta: "¿Lo son también el PSC y ERC cuando votan a favor de mociones similares en otros municipios?". La popular mostró su decepción e insistió en que era un debate que tenía que hacerse ahora, "aunque solamente haya una persona con velo integral", y no cuando sean 100.
Veray incluso citó al alcalde de Barcelona, Jordi Hereu (PSC), quien dijo que aprobar la prohibición de este tipo de velos por decreto municipal "era de sentido común".
Faxedas aplaudió que PP y CiU se preocupen "ahora" por políticas de igualdad, y admitió que los socialistas seguirán "rechazando firmemente" todas las situaciones de coacción y sometimiento sobre cualquier mujer, pero que para evitarlas, lo imprescindible es "seguir dialogando con la comunidad social y religiosa implicada para intentar llegar a acuerdos que respeten tanto los derechos individuales como la legislación común".
La alcaldesa de Girona, Anna Pagans, criticó a Veray por no profundizar en el tema en su discurso, como sí hicieron los demás grupos municipales. "La redacción de la moción es muy ligera", matizó. Aún así reconoció que sí hay ganas de diálogo y que será un tema sobre el que debatir "para llegar al fondo de la cuestión".
El concejal convergente, Albert Riera, aunque su partido votó a favor de la moción, también criticó que el redactado del texto no precisara más.
Por su parte, la regidora de ICV, Núria Tarés, expuso que lo necesario era "quitar el velo que cubre la mente de los fundamentalistas, no el que tapa la cara de la mujer", ya que si no, con una moción como la presentada, lo que se conseguiría sería que estas mujeres que usan velos integrales "quedaran encerradas en casa".