Alemania busca terminar tercero el Mundial
Los teutones se enfrentan a Uruguay para conseguir el bronce
Las selecciones de Alemania y Uruguay jugarán la final de consolación el sábado (20.30 horas), en el estadio de Port Elizabeth, donde lucharán por el tercer puesto del Mundial, en un partido en el que tratarán de recuperar el prestigio que ambos conjuntos perdieron en semifinales, cuando cayeron ante España los teutones y ante Holanda los ''charrúas''.
Más información
Los dos equipos realizaron un magnífico Mundial, convirtiéndose en las sensaciones del torneo. Los alemanes encandilaron a la afición con un fútbol vistoso, atrevido y valiente, mientras que los uruguayos hicieron reverdecer antiguos laureles basando su juego en una agresividad encomiable, aunque al final ambos se quedaron a las puertas de la gloria.
Alemania comenzó su periplo por Sudáfrica con una goleada a Australia, aunque tuvo que sellar su pase para octavos en el último partido de grupo, donde se impuso a Ghana. En los octavos, la ''Manschfat'' liquidó a la Inglaterra de Fabio Capello, en un partido salpicado por la polémica arbitral, pero donde el equipo de Joaquim Löew fue muy superior.
En cuartos de final, Ozil, Mueller y compañía se encontraron con los Messi, Tévez y Mascherano que dirige Diego Armando Maradona. De nuevo, una exhibición alemana con un fútbol rápido, directo y muy preciso borró del partido a los sudamericanos que se quedaron sin ideas, aturdidos y esperando un milagro del ''10'' que no llegó.
El seleccionador alemán, Joaquim Löew, se sobrepuso a las bajas con las que contaba al inicio del Mundial y cambió el estilo y la personalidad de la ''Manschfat'', configurando un equipo de muchos quilates, con jóvenes promesas que sucumbieron en el último escollo antes de la final. Un cabezazo de Puyol les dejaba fuera de la final, lejos de Johannesburgo y noqueados por el elegante fútbol español.
Subcampeón en 2002, tercero en 2006 y de nuevo entre las cuatro mejores en 2010, Alemania volvió a demostrar que en las citas finales siempre está ahí, codeándose entre los mejores; aunque en Sudáfrica hubo una selección que fue mejor, que jugó mejor y que también tenía varias cuentas pendientes con la historia. España estará en la final del próximo domingo ante los ''tulipanes''.
Por su parte, Uruguay afronta la final de consolación con el objetivo de conseguir el broche perfecto a su magnífica actuación en Sudáfrica, al que acudieron tras vencer en la repesca a Costa Rica y donde se han erigido como la mejor selección de Sudamérica.
La ''albiceleste'', con su fútbol asfixiante, las líneas de presión muy adelantadas y un ritmo vertiginoso, logró superar la fase de grupos, donde empató contra Francia y goleó a la anfitriona del campeonato, Sudáfrica.
En octavos se cruzó con Corea del Sur y gracias a los tantos del delantero Luis Suárez consiguió clasificarse para cuartos de final cuarenta años después de la última vez. De la mano del ''maestro'' Tabárez, Uruguay volvía a reencontrase con la historia.
En un partido sin precedentes, la ''albiceleste'' se midió a Ghana en los cuartos de final, donde dos modelos antagónicos se encontraban sobre el césped y donde la garra ''charrúa'' se impuso desde los once metros a la inocencia de las ''Estrellas Negras'', que fallaron un penalti en el último minuto de la prórroga.
En las semifinales frente a Holanda, Urugauy se vio superada por un fútbol europeo que no termina de digerir. La baja de Luis Suárez fue una losa demasiado pesada que Diego Forlán no pudo soportar en solitario y Uruguay, un país entero volcado con su selección, decía adiós al sueño de Sudáfrica. Ahora, buscarán el consuelo ante Alemania, pero ya conocen la senda del triunfo, el camino de vuelta al éxito.