Ezequiel Mosquera vence en la Bola del Mundo
Nibali continúa vistiendo el 'maillot' rojo y da un paso importante para coronarse en Madrid
El ciclista español Ezequeil Mosquera (Xacobeo) se adjudicó la penúltima etapa de la Vuelta Ciclista a España, que se disputó entre San Martín de Valdeiglesias y la Bola del Mundo, sobre 172,1 km, tras aventajar en línea de meta al italiano Vincenzo Nibali (Liquigas), que entró a su rueda y dejó sentenciada la ronda española.
El corredor gallego se despegó del pelotón a cuatro kilómetros de meta, pero siempre tuvo a una distancia prudencial al transalpino, que apretó los dientes e hizo gala de la sangre fría que le caracteriza. Con una diferencia máxima de 17 segundos, el ''maillot'' rojo nunca corrió peligro para él.
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Uno de los días marcado en el calendario por todos al conocer el recorrido no defraudó y recordó a los grandes días de la Vuelta. Las victorias épicas, las subidas infernales, las verdaderas luchas, fueron recordadas por Mosquera y Nibali, que volvieron a traer la gloria perdida a una de las tres ''grandes''.
El triunfo del ''tiburón'', podio en el Giro de este año, es la consagración de un ciclista total, que rinde bien en todas las especialidades de este deporte. En el momento más importante en lo que va de su carrera, se dejó hasta la última gota de sudor encima de las dos ruedas, donde con la cara desencajada fue minado la moral de Mosquera a medida que se llegaba a la cumbre.
A 9 kilómetros de meta, el pelotón neutralizó a los escapados y comenzaron una nueva etapa. Cautos, esperando el primer movimiento para decidir, los ciclistas se miraban de reojo, esperando el pistoletazo de salida para afrontar unas rampas muy duras y pobladas de gente, lo que hace aún más espectacular una ascensión de tal calibre.
Mosquera era el tenía toda la responsabilidad y tras pensarlo bien atacó cuando quedaban cuatro mil metros de auténtico infierno. Mostrando toda la clase que atesora, pareció que podría dejar atrás al italiano, pero éste ''saltó'' a por él, avisándole de que tenía que luchar mucho si quería quitarle el trono.
Un ''mano a mano'' de auténtico lujo en el que el español fue de más a menos. Y es que estos ataques están en la cabeza, cuando ves que tu rival se queda, aprietas como si fueran los últimos metros, pero cuando te aguanta, cuando no desfallece, las fuerzas flaquean y cada vez se hace más complicado.
Y así fue, Nibali aguantó y recortó en el último kilómetro toda la distancia a Mosquera, que sólo le pudo sacar los segundos de la bonificación. Así, el italiano se llevará la Vuelta sin ganar ninguna etapa, pero con la sensación de haber dado el salto de calidad definitivo.
La 75ª edición de la Vuelta Ciclista a España llega a su fin y lo hace en la capital. El domingo, los corredores completarán los últimos 85 kilómetros en una etapa entre San Sebastián de los Reyes y Madrid, donde darán doce vueltas por un recorrido en el centro de la capital.