"En Irán no se lapida", según el embajador de Irán en España

Madrid

La decisión definitiva sobre el caso de Sakineh Ashtiani aún no se ha tomado. El Tribunal Supremo de Irán será el que resuelva finalmente, aunque la posibilidad de que sea lapidada, según el embajador de Irán en España, está descartada.

"En Irán no se lapida a nadie porque así lo ordenan las autoridades del Poder Judicial iraní. Nuestro sistema judicial es muy estrcito respecto a las condenas a muerte, no se ejecutan así como así", ha explicado Morteza Saffari en en un encuentro con periodistas españoles en la embajada."La señora Ashtiani cometió el delito hace cinco años, y aún no se ha emitido una sentencia definitiva".

El Comité Internacional contra la Lapidación, una ONG con sede en Alemania anunció el pasado martes que iba a ser lapidada probablemente al día siguiente. El embajador explica que en Irán aunque un tribunal de primera instancia dicte una condena de muerte por lapidación, la decisión siempre debe ser autorizada por el Tribunal Supremo, que hace ya años prohibió las lapidaciones.

Ashtiani fue inicialmente condenada en 2006 por haber mantenido relaciones con otros hombres tras la muerte de su marido. Posteriormente la acusación incluyó la complicidad en el asesinato de su marido, por lo que fue nuevamente condenada a muerte. Es por esta segunda acusación por lo que sí podría ser finalmente ejecutada en la horca, aunque el embajador afirma que se podría determinar una reducción de la sentencia si "las cricunstancias así lo aconsejan o se llega a un acuerdo con la acusación particular".

Según Amnistía Intenacional a pesar de que en 2002 se declaró oficialmente la suspensión de las lapidaciones, éstas se reanudaron en mayo de 2006. La organización cree que además de Sakineh, al menos otras nueve mujeres están condenadas a morir lapidadas, aunque en varios casos el proceso de revisión judicial no ha concluido y pueden imponerse condenas alternativas.

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