La economía española se estancó en el tercer trimestre | 05-11-2010
El dato se explica por el fin de las ayudas a la compra de coches y la subida del IVA
La economía española se estancó en el tercer trimestre. Es decir, que entre julio y septiembre de este año, el PIB de nuestro país no registró crecimiento, pero tampoco retrocedió, se quedó en el 0%, siempre en relación con el trimestre anterior. Si la comparación la hacemos con el tercer trimestre de 2009, sí que se ha producido un crecimiento de la economía, en concreto de dos décimas. Es la primera vez que esto ocurre desde hace siete trimestres, según recuerda el Banco de España.
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El organismo que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez atribuye este estancamiento del PIB a un debilitamiento de la actividad que considera transitorio y que relaciona con el fin de las ayudas a la compra de coches y con la entrada en vigor de la subida del IVA, que hizo que los consumidores adelantaran muchas compras al segundo trimestre. También lo vincula a los ajustes presupuestarios puestos en marcha por el Gobierno.
Basándose en ese carácter transitorio de la situación vivida en el tercer trimestre, el Banco de España confía en que la economía española "recupere la senda de suave recuperación que había iniciciado a comienzos del año". En el primer y segundo trimestre de este año, la economía española había registrado crecimientos intertrimestrales de una y dos décimas, respectivamente.
Volviendo a los datos del tercer trimestre, el Banco de España destaca que el consumo de los hogares, que supone más de la mitad del PIB de nuestro país, interrumpió su ritmo de recuperación y cayó en relación al segundo trimestre. Y todo, por la desaparición de las subvenciones a la compra de coches y la entrada en vigor de la subida del IVA, que hizo que las familias adelantaran compras al segundo trimestre.
Sobre las previsiones de déficit del Gobierno, que ayer cuestionaba en un informe el Fondo Monetario Internacional, el regulador cree que las medidas que se recogen en los Presupuestos para 2011 van en la buena dirección. Pero recuerda que "la senda de consolidación presupuestaria programada no está exenta de riesgos" y sugiere al Gobierno que controle a las CCAA y Ayuntamientos para que no se desvíen y que, en todo caso, tenga un "plan B" con nuevas medidas de ajuste, por si hiciera falta.