Ahora que se ha anunciado el iPad 2, toda la atención de los rumores tecnológicos del mundo de Apple se centra en el nuevo modelo de iPhone -cuyo inminente anuncio, por otra parte, lleva semanas sonando en los medios especializados-. Se dice que será más ligero y más resistente que su predecesor. Ahora que se ha anunciado el iPad 2, toda la atención de los rumores tecnológicos del mundo de Apple se centra en el nuevo modelo de iPhone -cuyo inminente anuncio, por otra parte, lleva semanas sonando en los medios especializados-. Según el portal taiwanés Economic Daily News, citando a fuentes cercanas a los fabricantes de los dispositivos Apple, el nuevo iPhone desechará el diseño de cristal en la parte trasera de la carcasa y el borde de acero del modelo 4 del terminal. A pesar de la belleza y esbeltez del iPhone 4, ha presentado diversos problemas para Apple, como las rupturas y ralladuras de la parte trasera, los problemas de cobertura, el peso considerable o los retrasos en la fabricación del modelo en blanco. De esta forma, la compañía de la manzana retomaría un diseño más parecido al modelo original del terminal con una parte trasera de la carcasa en aluminio y una antena situada donde se encuentra el logotipo de Apple, evitando los laterales, para garantizar la cobertura. Además de mejorar los problemas de señal, el objetivo de la compañía con el nuevo diseño sería doble: por un lado, hacer el iPhone 5 más ligero y, por otro, más resistente a los golpes y ralladuras. Por otro lado, la compañía emplearía en su nuevo terminal el chip A5, que ha sido utilizado ya en el iPad 2 recientemente presentado. De esta forma, la nueva generación de dispositivos Apple compartirían procesador, del mismo modo que hicieron el primer iPad y el iPhone 4 con el chip A4. Este chip de doble núcleo es el doble de rápido que el A4 y es capaz de ofrecer unos gráficos nueve veces más potentes, según ha informado la propia Apple.