Rajoy defiende ante Merkel que irá "más allá" que Zapatero en las medidas para contener el gasto
Descarta que España necesite un rescate pero ve "triste" que exista el debate
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha trasladado a la canciller alemana, Angela Merkel, su apoyo a las medidas de ajuste acordadas en el último Consejo Europeo porque considera que van "en la buena dirección", pero ha asegurado que si gana las próximas elecciones irá "más allá" de lo que lo ha hecho el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
Las medidas acordadas por los jefes de Estado y de Gobierno en el marco del Pacto por el Euro en su última reunión en marzo "van en la buena dirección", en palabras de Rajoy, porque apuntan al control del déficit y a la contención del gasto público, pero ha indicado que quiere "ir más allá".
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En este sentido, Rajoy ha trasladado a Merkel su compromiso con la estabilidad presupuestaria y su propuesta de "constitucionalizar" la estabilidad presupuestaria y poner un techo de gasto para "todas" las Autonomías y Administraciones públicas. El líder del PP ha criticado como "gravísimo error" del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero el "romper el buen uso del gasto" que dejó el Ejecutivo de José María Aznar.
"Todos los pasos que se den en la buena dirección los apoyaremos, como hemos hecho siempre", ha declarado en rueda de prensa al término de su reunión con Merkel. Rajoy ha valorado los compromisos del Gobierno pero ha asegurado que las "líneas generales" de las reformas relacionadas con el déficit público, el sistema financiero, el mercado laboral y las pensiones son la "posición" del Partido Popular.
Pendiente la reforma laboral
Preguntado por si cree que las medidas concretas de España también van en la buena dirección, Rajoy se ha limitado a decir que reducir el déficit público, en su opinión, "está bien" y que está "a favor" de que haya una reforma laboral, "pero que se haga, porque no se ha hecho".
Además ha dejado claro que "la posición política del Partido Popular la marca el Partido Popular" y ha asegurado que la canciller Merkel no le ha pedido ningún tipo de un apoyo expreso a las medidas del Gobierno español, ni han abordado el papel de la oposición portuguesa que rechazó el último plan de ajuste del Gobierno luso para forzar su caída.
Sobre el riesgo de contagio del caso portugués a España, Rajoy lo ha rechazado de plano pero ha lamentado que exista tal debate. "Creo que no está en cuestión que España vaya a ser objeto de un rescate, no lo he creído nunca, con absoluta franqueza. Lo que me parece triste como español es que el debate sea si España puede ser o no objeto de un rescate", ha dicho para después pedir que no se caiga en la "autocomplacencia" y seguir haciendo "los deberes".
El líder del Partido Popular también ha señalado la necesidad de dar a España "seguridad" y por ello ha criticado la situación de "interinidad" creada por el anuncio de Zapatero de que no se presentará a las próximas elecciones sin aclarar quién será el candidato socialista, ni cuál su programa.
Rajoy ha asegurado que su viaje a Berlín no tenía por objetivo "criticar" al presidente del Gobierno pero ha lamentado que no haya aprovechado la "magnífica herencia" en el plano económico que recibió del Gobierno popular anterior. "Han hecho las cosas como las han hecho y los resultados son los que son. Venir ahora a echar la culpa al Partido Popular, por favor, los ciudadanos merecen que los respeten", ha replicado a las última críticas socialistas sobre su responsabilidad en la crisis.
España, país europeísta
Rajoy ha aprovechado el encuentro -que ha durado unos 45 minutos y en el que ha dicho que ha tuteado a Merkel porque tienen una excelente relación- para exponer el "profundo" espíritu europeísta de España y su compromiso con el euro. También ha defendido que España es un país que "ha hecho bien las cosas" y que "sin ningún género de dudas" podrá superar las dificultades que atraviesa y ha apostado por impulsar la tradición emprendedora del país para lograrlo, entre otras medidas.
Por último, Rajoy ha defendido la Política Agraria Común (PAC) como una prioridad "capital" y ha dicho que es una "urgencia" que los agricultores españoles no sean perjudicados con la reforma que los 27 deberán negociar de cara al nuevo marco presupuestario para 2014-2020.
Además ha reiterado la petición de haya un periodo transitorio para Galicia, Andalucía y Castilla La Mancha si dejan de ser regiones de objetivo de convergencia para no perder todas las ayudas europeas que reciben por ello. En el reparto de fondos comunitarios de cara al futuro, ha añadido, debería tenerse en cuenta la brecha tecnológica, el nivel de desempleo y la tasa de inmigración.
El presidente del PP tiene previsto verse también en Berlín con el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, para intercambiar impresiones sobre la economía. Después dará una conferencia sobre España, Europa y la economía en la Fundación Konrad Adennauer.