Día 16. Atascos y buena comida
Ya es más de media noche y h<b>ace sólo un rato que hemos llegado al hotel</b>. De muy mal humor. O resignados, mejor dicho. La organización del Tour de Francia <b>nos ha preparado hoy una emboscada de las buenas</b>
Casi tres horas nos ha llevado recorrer los 15 kilómetros que tiene Plateau de Beille, el puerto donde ha acabado la etapa. Y eso que hemos salido de los primeros. Cabrera estuvo listo y se metió por todos los sitios para esquivar la desorganización del Tour, de los Gendarmes y de media Francia. Primero han desalojado a los equipos, después a los coches oficiales de los 'vips', más tarde a la caravana publicitaria y, por último, al resto nos han dejado a nuestra suerte.
Si esto ocurre en la Vuelta a España hubiera tenido que dimitir alguien. Pero, como dicen aquí, 'Le Tour c'est le Tour' (El Tour es el Tour). Y por eso tragan con todo, nadie protesta y todo el mundo entiende que hay que consentirle cualquier cosa a esta carrera. Como la encerrona que los franceses le prepararon a Alberto Contador en la presentación. Esta gran Vuelta tiene muchísimas cosas buenas pero hay gente, dentro de la gran caravana, que se cree por encima del bien y del mal: los miembros de seguridad, los que se pasean en los coches oficiales de la carrera, la televisión pública gala... Demasiados gallos para el corral.
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A pesar de los atascos, de lo largo que ha sido el día y de la cantidad de horas que hemos estado en el coche, todo ha sido más llevadero después de la cena de la que disfrutamos ayer. Como dormimos muy cerca de la frontera, en plenos Pirineos, decidimos pegarnos un homenaje en el restaurante de Martín Berasategui, un lujo de tres estrellas Michelín. Yo no entiendo mucho de gastronomía, la verdad, pero le daría diez o quince. Es una experiencia única pasar por un lugar así y se lo recomiendo a todo el mundo. Suelo escucharlo cada martes en Hoy por Hoy, con Francino, y lo cierto es que es un genio de la cocina que ha revolucionado la restauración en todo el mundo.
Martín nos preguntó por Contador. Le dijimos que le han perdonado la vida y eso ha sido un gran error de sus rivales, porque el de Pinto tiene tanta clase que puede poner la carrera patas arriba en cualquier momento. Y ya le hemos visto con un mejor pedaleo, saliendo a todos los ataques y aguantando con los mejores. Gran día también para Samuel Sánchez, que luchó por la etapa, quedó segundo y asciende en la general. Es un candidato muy claro al podio.
Acabamos de escuchar a los expertos en El Larguero y todos coinciden en que el gran beneficiado de estos días ha sido Cadel Evans: no le han recortado tiempo en Los Pirineos y es superior a casi todos en la contrarreloj. Eso será la próxima semana, porque mañana habrá sprint. Y, después, descanso. Una jornada que necesitan muchos.