La OTAN empieza a ceder a los afganos el control de la seguridad
A lo largo de esta semana, la Alianza Atlántica va a transferir el control de varias provincias de Afganistán al gobierno de Karzai
Este lunes ha empezado el proceso por el que las autoridades afganas van a asumir las competencias en seguridad, hasta ahora, ejercidas por las fuerzas internacionales. La primera región transferida ha sido la provincia de Bamiyán, en el centro del país y una de las provincias menos conflictivas.
La primera fase se va a completar durante la próxima semana con el traspaso de siete áreas, entre ellas, Kabul y Herat. "La idea de la transición es incrementar la seguridad", ha dicho en los micrófonos de la SER, Jacobson Carsken, portavoz de la ISAF en Kabul. "Se trata de devolver la responsabilidad a las fuerzas afganas para que contribuyan al desarrollo del país".
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Asegura además que las tropas de la ISAF no se van a ir de estas regiones pero sí van a mantenerse "en un segundo plano". El traspaso se hace bajo la amenaza de los atentados de la insurgencia. "Sabemos que la transición no se celebrará sin violencia", reconoce el portavoz de la misión de la OTAN. "Pero lo principal del este proceso es que el gobierno afgano cree, y nosotros le apoyamos, que las fuerzas de seguridad afganas son capaces de controlar la seguridad del área transferida".
La segunda fase será en octubre y el traspaso se completará a finales de 2014 cuando se retiren todas las tropas internacionales.