El Consejo de Transición libio debe asumir el control para prevenir la espiral de abusos
Un informe de Amnistía Internacional recoge pruebas de violaciones de los derechos humanos cometidos por ambas partes
En el caso de las fuerzas de Gadafi, Amnistía Internacional denuncia crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad como ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzosas, torturas y malos tratos y ataques indiscriminados a la población, tal y como ocurrió en Misrata.
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Diana Elthaway forma parte del equipo de Amnistía que ha elaborado este informe. "En lo que se refiere a crímenes de guerra que hemos documentado en este informe... hay pruebas sólidas de ataques indiscriminados contra civiles en zonas de Misrata y Ajdabiya así como en Zawiya. Nos hemos reunido con supervivientes y familiares de personas que han muerto, y hemos encontrado que las víctimas era mujeres y niños, individuos que no están armados o niños en las calles y en sus hogares alcanzados por cohetes, muchos niños han sido heridos por armas que nunca deberían usarse en zonas residenciales pero que han sido utilizadas de forma frecuente por las fuerzas de Gadafi", apunta la experta.
En cuanto a las fuerzas rebeldes Amnistía Internacional tiene pruebas de linchamientos de soldados de Gadafi y supuestos mercenarios capturados en Al Baida, Derna y Bengasi. Ataques y asesinatos por venganza de miembros de las fuerzas de seguridad de Gadafi, la detención de centenares de personas, incluidos civiles en zonas bajo su control, torturas y malos tratos a numerosos detenidos, libios o civiles extranjeros.
Especialmente preocupante es la situación de los subsaharianos, que han sufrido ataques por parte de los rebeldes, que les consideran mercenarios pero también asaltos y robos por parte de los leales a Gadafi.
Elthaway apunta que: "Hemos constatado que al este de Libia, al igual que Misrata, cuando el Consejo Nacional de Transición tomó control de la ciudad, ha ocurrido con personas de piel negra, ya fueran libios o subsaharianos. Hay informaciones de linchamientos y asesinatos por grupos de gente enfadada; soldados de Gadafi y personas negras, ya sean libios o subsaharianos, que han sido linchados, golpeados, disparados. El Consejo Nacional de Transición no ha mostrado voluntad alguna de investigar o perseguir estos casos".
Amnistía Internacional pide a las nuevas autoridades libias que tomen medidas para garantizar el respeto a los derechos humanos, que los responsables de todos estos crímenes tengan un juicio justo y se dé reparación a las víctimas.