Emocionante y multitudinario adiós a Marco Simoncelli
El homenaje concluyó con una espectacular traca multicolor que vino a compensar las peticiones que en su día el padre de Simoncelli: "en lugar de un minuto de silencio, un minuto de ruido"
El circuito "Ricardo Tormo" de Cheste ha vivido un emocionante y multitudinario adiós al piloto italiano Marco Simoncelli, que falleció en el Gran Premio de Malasia y que hoy encabezaron el estadounidense Kevin Schwantz y su gran amigo Valentino Rossi.
Schwantz, campeón del mundo de 500 c.c. en 1993, fue el encargado de pilotar la Honda RC 212 V de Simoncelli, reconocido admirador del piloto tejano, en un hecho sin precedentes en el campeonato del mundo, pues todos los pilotos y motos de todas las categorías completaron una vuelta al trazado valenciano.
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Con Schwantz a la cabeza y casi todos los pilotos con el dorsal "58" de Simoncelli en sus motos, destacó la presencia de Valentino Rossi sobre su Ducati Desmosedici, quien por encima de su mono de cuero se puso una camiseta de su amigo "Súper Sic" y una bandera negra que recordaba al piloto y su dorsal.
Tras completar la vuelta al circuito entre los aplausos del público, todos los pilotos llegaron a la línea de meta, en donde esperaban todos los representantes del campeonato del mundo, desde organizadores e instituciones oficiales hasta equipos, mecánicos, prensa y público en general que abarrotó esa zona.
El homenaje al fallecido Marco Simoncelli concluyó con una espectacular traca multicolor que vino a compensar las peticiones que en su día hizo Simoncelli a sus más íntimos y que desde su fallecimiento demandó su padre "en lugar de un minuto de silencio, un minuto de ruido, de mucho ruido" y la traca valenciana cumplió al pie de la letra con esos deseos.