Entre 8.000 y 12.000 mujeres españolas se han implantado prótesis mamarias PIP en los últimos años
Así lo señala la Sociedad Española de Cirugía plástica y reparadora. Sobre su peligrosidad ya había alertado un cirujano español, Jaume Serra, sin que nadie le hiciera caso
En España según datos de la Sociedad Española de Cirugía plástica y reparadora entre 8.000 y 12.000 mujeres se implantaron prótesis PIP en los últimos años. Unas prótesis peligrosas sobre las que ya alertó, antes incluso de que lo hiciera el gobierno francés, Jaume Serra, Cirujano plástico y miembro de esta sociedad científica. Ni sus compañeros, ni el ministerio de Sanidad le hicieron caso. Serra recomienda a las mujeres que mantienen esos implantes que se los retiren porque están fabricados con una silicona -no homologada- que puede contaminar su cuerpo.
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En España desde 2005 los cirujanos tienen obligación de notificar cualquier problema que surja con este tipo de prótesis. Pese a que ha habido cientos de roturas y encapsulamientos con las PIP. Ningún cirujano plástico ha dado aviso a las autoridades. El doctor Jaume Serra se hartó de denunciarlo ante la Sociedad Española de Cirugía plástica y reparadora a la que pertenece, pero con este tema, asegura, imperaba la ley del silencio. En febrero de 2010 su por fin se lo reconoce por mail aunque tampoco sirvió de mucho.
"Lo amoral es que desde el 12 de febrero que es cuando se conoce eso hasta el 28 de marzo que dan la alerta los franceses, durante ese periodo muchas españolas se pusieron esas prótesis", señala el doctor Serra.
Tampoco, incluso después de la alerta, los cirujanos avisaron a las mujeres -que se habían puesto esos implantes- de que podían ser peligrosos. Y cuando ellas volvían a la consulta ya con síntomas de rotura o encapsulamiento los médicos echaban balones fuera. Eva Gimeno es una de las afectadas.
"Como el fabricante se fugó ellos los médicos dicen que también son víctimas y que no tienen culpa tampoco", señala Eva.
Como dice el cirujano Jaume Serra, sí son víctimas, pero de la codicia. La abogada Rosario Sevillano lleva el caso de 32 mujeres que han tenido que quitarse las prótesis PIP.
"La inmensa mayoría de las clientas que tengo tenían el convencimiento de que las prótesis les iban a durar toda la vida ,porque así se lo había dicho el cirujano. Pero por seguridad deben de cambiarse cada 8 o 10 años", asegura esta abogada.
El cirujano plástico Jaume Serra recomienda a las mujeres que tienen implantadas estas prótesis que se las retiren.