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FÓRMULA 1 | GRAN PREMIO DE ESPAÑA EN MONTMELÓ

Montmeló: examen crucial para Ferrari

Ferrari ha trabajado a fondo durante las tres semanas de parón entre el Gran Premio de Bahréin y el de España, pero también lo han hecho el resto de equipos. ¿Habrá conseguido recortar diferencias la escudería italiana?

Montmeló va a marcar definitivamente un punto de inflexión en la confianza de Ferrari. Sus ingenieros se han devanado los sesos día tras día para dar con soluciones que lleven al monoplaza de Fernando Alonso a un nivel similar al de los coches aspirantes al título. Todo por culpa de un nuevo mal comienzo de la escudería comandada por Stefano Domenicalli

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El Gran Premio de España es la carrera de la esperanza para Ferrari y para Alonso. Después de otro comienzo decepcionante (a pesar de la victoria de Fernando en Malasia), en Maranello no han escatimado ingenieros, medios, dinero y horas de trabajo para corregir los errores cometidos y tratar de hacer del F2012 un coche competitivo. La carrera de Montmeló será un examen crucial para saber si se puede seguir confiando en Ferrari o si todos los mensajes de optimismo quedan en humo. Montezemolo, Domenicalli y Fry (la cúpula de Ferrari) están muy confiados en dar un gran paso adelante, en pasar sin apuros a la Q3 y en luchar por el pódium. Si no es así el futuro será bastante negro

La F1 es un complicado deporte-negocio en el que, como en el fútbol, se mueven cantidades económicas desorbitadas que resultan casi obscenas en la época de crisis mundial que sufrimos. En Maranello, cerca de Bolonia, cientos de ingenieros con un presupuesto casi ilimitado trabajan, en tres turnos, 24 horas al día y 7 días a la semana para mejorar unas décimas de segundo por vuelta el rendimiento del coche rojo. Después de miles de análisis, se han modificado los escapes, mejorado el alerón delantero, el difusor, el fondo plano,....y el coche, obviamenete, va a mejorar. El matiz es que el resto de equipos no se han quedado de brazos cruzados mirando cómo trabajan en Italia y también van a progresar. De la distancia que consiga recortar Ferrari dependerá el destino de Alonso en el resto del año. Si las diferencias se mantienen habrá que empezar a pensar que con ese rifle y esas balas sólo se puede aspirar a la caza menor

Ferrari es el mayor símbolo de la F1. Es historia, prestigio y carisma. El cavallino rampante se asocia a la victoria y a tiempos de gloria. Por eso de la Scuderia siempre se espera lo mejor. En un 2010 que comenzó renqueante reaccionaron y estuvieron a punto de ganar el mundial si una torpeza de un tal Chris Dyer en Abu Dhabi no lo hubiera impedido. En 2011, todo nació torcido y acabó mal. En 2012, tampoco han aprendido la lección y, como los flojos estudiantes, han tenido que recuperar el terreno perdido, hincar los codos y cambiar el método de trabajo

¿Hay motivos para confiar en la reacción? De un líder siempre se espera que se levante después de haber caído. Por eso merecen un voto de confianza. Ojalá el domingo la puerta de la ilusión se abra por fin

 
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