Bruselas propone que el fondo de rescate recapitalice directamente los bancos
La Comisión Europea ha sugerido que el fondo de rescate de 500.000 millones de euros pueda inyectar directamente dinero en los bancos europeos, lo que ahorraría a España tener que solicitar un rescate
La Comisión Europea ha sugerido este miércoles que el fondo de rescate de 500.000 millones de euros pueda inyectar directamente dinero en los bancos europeos con problemas sin que el Estado miembro afectado tenga que someterse a un plan de ajuste.
"Para acabar con el vínculo entre los bancos y la deuda pública, podría considerarse la recapitalización directa por parte del mecanismo europeo de estabilidad", señala el documento de recomendaciones presentado por Bruselas para mejorar el funcionamiento de la eurozona.
Más información
- Bruselas dará a España un año más para corregir el déficit si concreta más ajustes
- Fitch rebaja la calificación de ocho comunidades autónomas
- El Eurogrupo decidirá el futuro del sector financiero español
- Olli Rehn: "No habrá nuevas condiciones fiscales a España por el rescate"
- De Guindos: "Estos días van a ser de enorme tensión y volatilidad en los mercados"
- Rajoy y cuatro de sus ministros deben explicar el rescate en el pleno del Congreso
- La eurozona acuerda la recapitalización directa de la banca española
- El Banco de España considera que Popular e Ibercaja no necesitarán ayudas
- La prima de riesgo española marca un nuevo máximo en los 540 puntos básicos
- De Guindos niega que el BCE haya rechazado el plan para sanear Bankia
El Ejecutivo sugiere así crear a largo plazo una "unión bancaria" que incluiría también una mayor coordinación en materia de supervisión y un sistema único de garantía de depósitos.
El presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, ha pedido a los líderes europeos que acuerden el calendario para la creación de esta "unión bancaria" en la cumbre que celebrará los días 28 y 29 de junio.
Estas ideas, así como la perspectiva de emitir eurobonos a largo plazo, significarían "una señal muy importante sobre la solidez e irreversibilidad del euro", ha sostenido Barroso.