Mourinho: "Confío totalmente en mi equipo, ha cambiado el chip"
El luso ha asegurado en la previa del partido ante el Barcelona, que se celebrará este domingo en el Camp Nou (19.50 horas), que "un empate podría ser bueno"
"Depende del partido que se dé, un empate sería bueno. Si tienes muchas oportunidades y mereces ganar, empatar sería malísimo. Pero si por lo contrario, tu partido es malo y llegas una vez y marcas un gol, el empate sería un resultado brutal", afirmó Mourinho en rueda de prensa.
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Mourinho ha descartado que sus dos arietes puros, el francés Karim Benzema y el argentino Gonzalo Higuaín, vayan a partir de inicio "juntos" en el partido ante el Barcelona en el Camp Nou este domingo. "Benzema e Higuaín no jugarán juntos. El equipo ha jugado mucho en el Camp Nou y no será difícil adivinarlo", aseguró de manera contundente el preparador madridista. Sin embargo, no desveló si en el once inicial formará Kaká, recuperado en los últimos partidos, Özil o Modric. "No puedo decir nada. Ya he dicho que el 'Pipa' y Benzema no jugarán juntos y que viendo cómo he jugado otras veces se puede establecer un patrón", añadió. Precisamente sobre la suplencia del alemán Mesut Özil, indiscutible la pasada campaña y puesto en duda en la actual, Mourinho quiso quitarle hierro al asunto. "Simplemente creo que no hay que hacer dramas cuando un jugador se queda en el banquillo. Hay trece que se quedan en el banquillo y parece que cada vez que uno se queda tenemos una historia. Me pagan para hacer alineaciones e intento hacerlo lo mejor posible", manifestó.
Además, aseguró que prefiere que Gerard Piqué, tocado de cara al duelo, juegue, ya que quiere un partido entre "los mejores". "La temporada pasada en el partido de Liga con el Barcelona Piqué estaba bien y se quedó en el banquillo. No sé qué pasa por la cabeza de otro entrenador en condiciones normales, sólo sabré el equipo adversario una hora antes del partido, y a mi equipo antes", afirmó. "No puedo decir el equipo en función del otro, pero tenemos nuestra idea, nuestro equipo está preparado para jugar. El Barcelona es un equipo que tiene una plantilla más que suficiente para solucionar cualquier problema. Por mí, que jueguen todos, porque partidos como éste metafóricamente hacen que pare el mundo", añadió.
Mourinho no quiso dejar pasar la ocasión de mostrar su satisfacción por el hecho de que la lesión de Carles Puyol, que sufrió una luxación en el codo durante el partido de Liga de Campeones ante el Benfica y que estará apartado de los terrenos de juego dos meses, no sea tan grave como pudiese parecer en un primer momento. "Que jueguen todos los que están bien, y en el caso de Puyol me alegro de que la lesión no sea tan grave como parecía", aseguró.
El técnico del conjunto blanco no quiso comentar la posibilidad de que el argentino Javier Mascherano y el camerunés Alex Song puedan formar como pareja de centrales en ausencia de Puyol y Piqué. "Yo no considero nada. Hemos jugado allí sin Pepe y no se acabó el mundo. El fútbol es así", concluyó.
Mourinho confía en los suyos
Mourinho declaró confiar ciegamente en el compromiso de sus jugadores de cara al Clásico. "Confío en mis jugadores de cara al partido. Siempre lo hago, también en los momentos en donde las sensaciones no son del todo buenas. Tengo tantos años de fútbol como para saber que cada partido tiene su historia y que muchas veces se deciden por detalles. La confianza en mis jugadores es cien por cien", declaró.
Tras un irregular inicio de temporada, el equipo madrileño ha dejado escapar a su máximo rival hasta los ocho puntos pero, tras la victoria ante el Manchester City en Liga de Campeones, el técnico portugués vio un cambio en la actitud de sus jugadores. "Esa victoria es el punto de partida hacia el juego que queremos. No hablo de resultados, sino de táctica y compromiso de todo el equipo. La única preocupación ahora es llegar al nivel del año pasado, que sabíamos que era muy difícil mantener durante muchos meses consecutivos", dijo. "Es verdad que hemos perdido ese nivel de juego y rendimiento con el que conseguimos la Liga el año pasado, pero lo estamos recuperando y el partido ante el Barcelona es un buen momento para seguir haciéndolo. Ojalá salgamos del Camp Nou pensando que hemos hecho un buen encuentro", aseguró el de Setúbal.
Además, preguntado sobre las actuaciones arbitrales de los últimos partidos, Mourinho fue claro. "Han pasado cosas desde el inicio de la temporada pero nadie en el Real Madrid ha hecho un sólo comentario sobre los árbitros y no voy a ser yo el primero que lo haga", afirmó de forma rotunda.
Por otro lado, Mourinho desveló la causa por la que el equipo viajará el mismo día del partido a Barcelona y aseguró que no ha podido hacer ningún trabajo específico de cara al Clásico. "Tenemos tiempo suficiente aunque sea pronto. Descansaremos por la tarde y estaremos listos. No se necesita una gran charla táctica, porque en este tipo de partidos hace falta estar en el partido. Los dos equipos están preparadísimos, como los árbitros", aseguró. "Tampoco hemos tenido tiempo de trabajar el balón parado, ni otra cosa específica. Jueves y viernes fueron sesiones de recuperación. Tenemos un día menos de descanso que el Barcelona y lo único que me preocupa ahora es recuperarnos para el partido. No hemos preparado nada especial", continuó.
"No hay un patrón en estos partidos"
Por otro lado, el preparador madridista destacó la imprevisibilidad de este tipo de encuentros. "No hay un patrón en estos partidos. No se sabe lo que va a pasar. Los equipos son buenos, los dos quieren ganar el partido pero nunca se sabe. Normalmente son partidos con resultados equilibrados, aunque alguna vez han sido desequilibrados... Nuestra preocupación es jugar bien y continuar mejorando hasta el nivel que nos hizo campeones la temporada pasada", declaró.
"Por eso, espero el mismo partido de siempre. El mundo se para cuando Real Madrid y Barcelona se enfrentan y se espera un gran partido. Los dos equipos tenemos una gran responsabilidad porque somos conjuntos de referencia mundial", afirmó el portugués.
Además, en cuanto al tinte político que podría tener el partido, Mourinho se mantuvo al margen. "No pienso nada sobre el ambiente que se pueda vivir por el tema político. Ni para un lado ni para el otro. Para mí sólo es fútbol, nada de política", aseguró.
Por último, el entrenador del Real Madrid afirmó que no ve ninguna diferencia entre el Barcelona de Pep Guardiola y el de Tito Vilanova y aseguró que, a día de hoy, su equipo y el conjunto catalán llegan "en las mismas condiciones". Además, no quiso opinar sobre la posibilidad de que las diferencias se amplíen hasta los 11 puntos y declaró que "primero hay que jugar el partido".
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