España cierra durante dos horas y media el paso fronterizo con Marruecos

Decenas de marroquíes comenzaron a lanzar piedras y botellas a los agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que están en el puesto fronterizo de Beni Anzar. Se trata del paso principal entre España y Marruecos.

Todo se produjo a raíz de que la Policía Nacional impidiera el paso a unos transeúntes por motivos de seguridad, tal vez, por los antecedentes de dichos individuos. A raíz de esa negativa, las decenas de marroquíes que esperaban para pasar la frontera comenzaron a insultar y arrojar piedras, botellas y todo tipo de objetos contundentes a la Policía Nacional y Guardia Civil.

Inmediatamente cerraron las verjas de dicho puesto teniendo que ser ayudados ante la avalancha de objetos arrojados por los GRS, de la Guardia Civil y por la UYP, la unidad de intervención de la Policía Nacional.

El Delegado del Gobierno se desplazó a la zona para comprobar in situ los hechos y apoyar a los agentes. El Barkani declaró que "le parece intolerante este tipo de actitud" ya que la policía velará para que no entren delincuentes a Melilla. También expresó una vez más que las policías de ambos lado de la frontera debían trabajar juntas para evitar el paso de delincuentes o personas que alteren la seguridad de un país.

A primera hora de la noche se ha vuelto a abrir el paso fronterizo después de que los servicios de limpieza quitaran del acceso los objetos arrojados