Los rectores alertan del "suicidio de la economía" por los recortes en investigación
Advierten de la "pérdida irreparable" de capital humano con el cierre de líneas y grupos de investigación en muchas facultades
En un duro comunicado, la Conferencia de Rectores Universitarios de España (CRUE) denuncia que los recortes del Gobierno -un 80% menos en subvenciones públicas para 2013- ponen en peligro la independencia tecnológica de España en un futuro
Alarmados. Así se declaran los rectores ante el impacto "crítico" de los recortes en I+D+i sobre las universidades, que concentran las dos terceras partes de la actividad investigadora en España. En un comunicado, denuncian la insuficiencia de financiación en los presupuestos de 2013 cuyo importe retrocede a niveles de hace diez años.
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La consecuencia, según advierten, será que muchos grupos de investigación se verán obligados a abandonar sus actividades, con el consiguiente retroceso del sistema. "La pérdida de ese capital humano y del retorno que su actividad está produciendo a la sociedad son desastrosas para nuestra economía y su resultado no tardará en manifestarse en los indicadores más reputados".
Educación, Sanidad e Investigación, fuera del ajuste
Los rectores denuncian también la asociación de los gastos de I+D+i con los objetivos de déficit de las comunidades autónomas de modo las administraciones autonómicas han recortado muchos programas estratégicos de investigación para estabilizar sus cuentas públicas. "Es un grave error, advierte el comunicado, porque la investigación y el desarrollo no es un gasto sino una inversión".
En este sentido los rectores piden al Gobierno que preserve la Educación, la Sanidad y la I+D, manteniendo estos sectores fuera del ajuste.
El comunicado también reclama una efectiva coordinación entre los dos ministerios que tienen competencias en I+D+i, Educación y Economía, para evitar retrasos y duplicidades, que provoquen una pérdida de oportunidades y un desaprovechamiento de los recursos.
Los rectores finalizan su escrito señalando que "no estamos sólo ante un asunto científico sino de primer orden económico. Sólo así evitaremos el deterioro irreparable de la I+D+i que supone la asfixia financiera, que se traducirá en el suicidio aplazado de la productividad económica de España.