El Supremo confirma una condena por el timo de los 'billetes tintados'
Estafaron 50.000 euros a la víctima haciéndole creer que duplicaban sus billetes metiéndolos en agua junto papel tintado
El Tribunal Supremo ha confirmado la expulsión de España por cinco años para dos estafadores que usaron el timo de los 'billetes tintados'. Los condenados hicieron creer a su víctima que duplicaban billetes a base de introducir su dinero verdadero en agua junto con papel tintado, y le robaron 50.000 euros en el engaño que ahora tendrán que devolverle.
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El Tribunal Supremo ha confirmado las penas de dos y un año de cárcel, sustituibles por cinco años de expulsión del territorio español, que la justicia vasca impuso respectivamente a dos estafadores por el timo de los 'billetes tintados', un engaño que algunos definen como "el timo de la estampita del siglo XXI". La estafa de los billetes tintados, también conocida como el "wash-wash", consiste en hacer creer a la víctima que se pueden crear billetes nuevos a base de aplicar "productos químicos" a cartulinas negras mezcladas en agua con billetes verdaderos. Unos productos que son casi tan falsos como los billetes que se generan. En algunos casos, sostienen que los billetes fueron tintados en la aduana de su país y que necesitan "recuperarlos". En otros, que con los productos químicos adecuados pueden multiplicar billetes "a partir de los negativos de los billetes originales".
El último caso en haber pisado los tribunales es el de un ciudadano del País Vasco, que cayó en el engaño y al que los estafadores robaron 50.000 euros, una de las cantidades más elevadas asociadas a este tipo de estafas. Para ganarse su confianza, los timadores hicieron una primera prueba con un billete de 50 euros, prueba que fue más que suficiente para la víctima: metieron un billete con dos cartulinas negras en un cubo de agua que al cabo del rato se transformó en tres billetes de 50 euros aparentemente legales. Rápidamente accedió a repetir la operación con 50.000 euros que poseía, metiendo el dinero verdadero entre los billetes tintados y dejándolo en su casa de Gernika para que el proceso se completara durante la noche.
Al día siguiente una llamada informó a la víctima que sus dos interlocutores del día anterior habían sido detenidos, y que otras personas irían a su domicilio a supervisar el proceso de "recuperación". Los dos cómplices aprovecharon un descuido para hacerse con el paquete de billetes de curso legal y se marcharon de allí con los 50.000 euros de la víctima.
Es ahora la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo quien confirma las penas impuestas por la justicia vasca en 2011. La Audiencia Provincial de Vizcaya condenó a los dos estafadores a penas respectivas de dos y un año de cárcel respectivamente para los dos estafadores que robaron el dinero de la víctima, dos penas sustituibles por la expulsión del territorio español por el plazo de cinco años. De la misma manera, deberán indemnizar de manera conjunta a la víctima con los 50.000 euros que le robaron durante la estafa. Considera la Sala de lo Penal que el resultado del engaño "no es imputable a la víctima, que no lo consintió de manera libre y consciente".
