Los promotores de la fiesta metieron a cientos de personas por una salida de emergencia
Las grabaciones que publica EL PAÍS demuestran la falta de control en los accesos al recinto
Decenas de cámaras de seguridad grababan todo lo que sucedía el 1 de noviembre en la fiesta de Halloween del Madrid Arena. Esas imágenes, publicadas por el periódico EL PAÍS, muestran la falta de control en los accesos a la fiesta y el exceso de aforo.
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La policía nacional lleva días analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad del recinto Madrid Arena donde el pasado 1 de noviembre se produjo una avalancha que provocó la muerte de cuatro chicas y dejó a otra en estado muy grave. Esas grabaciones, que publica este sábado el periódico EL PAÍS, muestran como los organizadores de la fiesta -a través de los vigilantes de seguridad contratados- deciden desviar al entrada de cientos de personas hacia dos salidas de emergencia, en la planta 1 y 0. En ese momento la pista central ya se encontraba atestada, según puede verse en los videos publicados.
El aforo del Madrid Arena, según la autorización municipal, era de 10.600 personas repartidas en los tres niveles del recinto, no solo en la pista central. En el momento de esa entrada por las salidas de emergencias, comienzan a verse peligrosas aglomeraciones de gente y en una de ellas puede verse como alguien enciende una bengala. Los vigilantes del interior intentan cerrar el acceso a la pista central por las escaleras de las pistas superiores pero los del exterior siguen permitiendo la entrada de gente por las salidas, una de ellas de acceso directo a la pista.
Según las imágenes, cuando se produce la avalancha en la que murieron las cuatro jóvenes no hay vigilantes. Es más tarde cuando llegan y ayudados por otros jóvenes intentan rescatar a los chicos atrapados en el tapón.