El asesino de Newtown disparó varias veces contra los niños
Los forenses confirman que los 20 niños fallecidos tenían entre 6 y 7 años
La tragedia de la escuela de Newtown se vuelve más horrible a medida que se van conociendo detalles. La policía y los forenses que han realizado las autopsias han confirmado que los 20 niños que murieron tenían entre 6 y 7 años. 12 eran niñas. Todos recibieron varios disparos, algunos a corta distancia. Las seis adultas fallecidas eran mujeres.
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Ciudadanos y familiares de los alumnos encienden velas en memoria de las víctimas del tiroteo
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Los forenses han explicado que algunos niños tenían heridas devastadoras por lo que los padres los han identificado con fotografías para evitar el impacto de verles directamente. "Llevo en esto más de un tercio de siglo, mi sensibilidad puede que no sea la de un hombre normal, pero esto es probablemente lo peor que he visto o que cualquiera de mis colegas ha visto, aseguraba Wayne Carver, el director de la Oficina Forense del estado de Connecticut.
Adam Lanza les mató con un fusil semiautomático de uso militar. Lo había comprado legalmente su madre, Nancy, aficionada a las armas, que fue la primera víctima. Su propio hijo la mató antes de dirigirse a la escuela.
El jefe de la policía de Connecticut, Paul Vance, ha explicado que el tirador entró en el centro a la fuerza. La directora y varias de las profesoras que se enfrentaron a él están entre los fallecidos.
"Les dije que tenían que estar absolutamente callados, porque estaba tan asustada de que si nos oía vendría y empezaría a disparar contra la puerta", ha contado a la cadena ABC, Kaitlin Roig, una de las maestras que se encerró con los niños en un aula a oscuras y atrancó la puerta. "Les dije que tenían que saber que les quería mucho y que todo iba a estar bien. Pensé que iba a ser lo último que escucharían porque creí que todos íbamos a morir".
La autopsia del asesino se realizará este domingo aunque se cree que se suicidó usando la última bala que le quedaba antes de que llegara la policía.
El padre del tirador, Peter Lanza, ha emitido un comunicado. "No hay palabras para expresar lo desconsolados que estamos. Estamos en estado de incredulidad e intentando encontrar alguna respuesta" escribe.
El presidente Barack Obama viaja a Newtown este domingo para reunirse con las familias de las víctimas y los trabajadores de emergencias y participará en una vigilia organizada en recuerdo de los fallecidos.
