Mueren 54 civiles sirios tras un ataque contra un autobús de trabajadores de la industria militar
La oposición a los islamistas y el Observatorio denuncia el "silencio internacional" ante los crímenes en Siria
Al menos 54 civiles han muerto como consecuencia de un atentado con bomba contra un autobús lleno de trabajadores de una fábrica de productos militares en la provincia de Hama. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha querido anunciar este viernes las muertes para condenar el "silencio internacional" ante los "crímenes de guerra" perpetrados en el conflicto sirio.
El atentado se produjo el pasado miércoles cuando los trabajadores salían de su turno en la fábrica, situada en la localidad de Beraq. El número de víctimas podría aumentar porque hay varias personas con "heridas graves" como consecuencia de la explosión de la bomba de fabricación casera.
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El Observatorio, con sede en Londres y con una amplia red de informantes en Siria, ha condenado este viernes "este último crimen de guerra contra los civiles" y ha expresado su "sorpresa por el silencio de la comunidad internacional ante las masacres cometidas en Siria por todas las partes". Hay que recordar que el atentado se produjo el pasado miércoles.
De momento ningún grupo armado ha reivindicado el ataque, pero fuentes de la oposición no han dudado en responsabilizar a los insurgentes islamistas radicales de este atentado "terrorista" contra civiles. "Son trabajadores, son civiles, gente que necesita trabajar para alimentar a sus familias, eso no les convierte en criminales", ha declarado un activista opositor bajo condición de anonimato.
