Özil guía la remontada del Real Madrid ante el Mallorca

Los goles de Nsue y Alfaro pusieron al Real Madrid contra las cuerdas, pero la entrada de Özil tras el descanso devolvió la actitud al equipo blanco, que hizo tres goles en cinco minutos para remontar el partido y asegurarse una jornada más la segunda plaza de la Liga

El Mallorca llegó al Bernbéu con las ideas claras: posesión para el Real Madrid y salir rápidamente a la contra gracias a la velocidad de Gio. Ayudó al equipo bermellón la apuesta de Mourinho, que colocó a Pepe como director de orquesta en el centro del campo, puesto en el que el luso desentona, más acostumbrado a tocar instrumentos de percusión. A la ausencia de un Xabi Alonso o un Khedira en el centro del campo se sumó la apatía blanca, que no entró en el partido hasta la segunda parte.

Lo aprovechó un Mallorca muy inteligente, que optimizó sus recursos sobre el césped del Bernabéu, las contras y las jugadas de estrategia a balón parado. Así llegaron sus goles, el primero lo metió Nsue, que remató de cabeza solo en el área un centro de Gio tras un saque de banda. El gol, en el minuto 6, levantó el runrún entre los aficionados del Bernabéu, que veían como una vez más su equipo sufría por arriba.

Poco necesitó el Madrid para empatar, un chispazo de Modric fue suficiente. El croata, que goza de sus mejores días desde que aterrizase en España, se fue de un par de rivales antes de poner un pase en profundidad para Pepe, que solventó la salida de Aouate con un pase para Higuaín, el argentino solo tuvo que empujar la pelota para igualar de nuevo el choque. Los defensores visitantes pidieron fuera de juego del argentino tras el pase de Pepe, pero el gol era totalmente legal.

Los goles no cambiaron el guion del partido, el Real Madrid tenía la posesión y el Mallorca buscaba balones en profundidad a la contra. En uno de esos contragolpes el conjunto de Manzano encontró un córner que puso Gio, omnipresente en el ataque bermellón, para que Bigas peinase y Alfaro, libre de marca, rematase a gol tranquilamente en el segundo palo. El delantero, ex del Sevilla y del Tenerife, anotó por tercera jornada consecutiva.

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El nuevo tanto visitante no animó al Real Madrid, que seguía a su ritmo, apático sobre el césped y sin incomodar al Mallorca. Tan solo Cristiano Ronaldo, para el que no existen los partidos menores, intentó, sin éxito, llevar de nuevo la igualada al marcador. La más clara de la primera parte fue un disparo del luso que tocó el larguero antes de irse a la grada. El descontento de la afición crecía y cuando Hutton volvió a rematar de cabeza otro saque de esquina los pitos empezaron a resonar en el Bernabéu

La entrada de Özil activa al Real Madrid

En el descanso Mourinho cambió el esquema, se fueron los ausentes Arbeloa y Morata y entraron Özil y Benzema. La entrada del alemán cambió por completo al Real Madrid, en solo siete minutos el conjunto blanco hizo tres goles minando la moral del Mallorca. En el minuto siete Cristiano Ronaldo volvió a volar para alcanzar un córner puesto por Özil. El luso remató de cabeza en el primer palo y puso el esférico en la base del segundo. Dos minutos después llegó el que será a buen seguro el gol de la jornada. Modric agarró un balón a treinta y cinco metros del área y sin pensarlo reventó la red con un disparo soberbio que entró por la escuadra. Dos minutos y remontada, pero aún faltaba el tercero. En el 12 apareció otra vez Özil, esta vez asistiendo a Higuaín, que libre de marca sentenció el choque.

Tres goles en cinco minutos y final del partido. A pesar de que quedaba media hora de partido el Mallorca se hundió ante la reacción del Real Madrid, que encontró en Özil el aceite que necesitaba para engrasar la máquina blanca y firmar una remontada a la que puso la guinda Benzema, que, tras pase de Higuaín, marcó el quinto ya sobre la bocina, gol que no celebró.

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