300 inspecciones permiten recuperar a la Guardia Civil dos anclas de más de 2.000 años
También se ha localizado un posible galeón del que no se tenía conocimiento

Imágenes del hallazgo cedidas por la Guardia Civil.

La Guardia Civil ha llevado a cabo más de 248 inspecciones que han permitido recuperar ánforas del siglo I y diversas piezas de cerámica cuya antigüedad está aún por determinar. Todo ello ha permitido a los agentes abrir varias líneas de investigación y la imposición de sanciones a clubes náuticos y de buceo que exponían este tipo de piezas sin la correspondiente autorización.
La Guardia Civil ha llevado a cabo una operación contra el expolio submarino, que se enmarca dentro de la primera fase de la operación 'Anfora'.
En las más de 248 inspecciones realizadas se han recuperado dos anclas de más de 2000 años de antigüedad, ánforas del siglo I, y un posible galeón del que no se tenía conocimiento. Además, se han encontrado piezas de cerámica y otros efectos arqueológicos que están siendo estudiados.
La Guardia Civil ha impuesto sanciones a clubes naúticos y de buceo que exponían este tipo de piezas sin autorización. Una de las vertientes de esta operación ha evitado el expolio conocido como de 'pequeña escala', cuyos casos varían desde los descubrimientos accidentales de pescadores que en su faena diaria encuentran objetos procedentes del fondo marino como útiles de navegación, anclas e incluso cañones.
La operación tiene como objetivo controlar a los buceadores aficionados que se apropian de estos objetos para comercializar con ellos.
La Guardia Civil advierte de que este tipo de actividades causan daños irreparables en los yacimientos porque no son extrídos de forma adecuada. La operación 'Ánfora' se incluye dentro del 'Plan para la Defensa del Patrimonio Histórico español' puesto en marcha por el ministerio del Interior para la defensa de los bienes culturales.




