Constitución nueva o "desastre"

Granada

Los secretarios generales de las federaciones del PSOE, además del PSC, han aprobado este sábado por unanimidad el documento territorial en el que plantean una reforma de la Constitución para avanzar hacia un Estado federal porque, según consta en la propuesta, "el federalismo es el único punto de encuentro".

El PSOE tiene un plan y, esta vez, es el mismo que tiene el PSC: resolver el debate territorial en España con una nueva Constitución federal. Ese es el acuerdo que han cerrado en Granada el secretario general del partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, y los 17 barones territoriales, entre ellos el catalán Pere Navarro, y que los socialistas presentan como la alternativa tanto a los secesionistas como a quienes quieren recentralizar España.

"El triunfo de cualquiera de esas dos ideas -ha dicho Rubalcaba- sería un desastre y desataría de nuevo todas las tensiones territoriales que durante demasiado tiempo hicieron imposible la convivencia en libertad de los pueblos de España". Por eso Rubalcaba emplaza a negociar al PP, sin cuyo concurso la reforma constitucional será inviable.

Está por ver el recorrido de la propuesta, si el PSC logra con este texto detener la sangría en las encuestas y si el PSOE mantiene todas las premisas tras las primarias que designen al candidato a la Moncloa, esas primarias de las que Rubalcaba no quiere hablar.

Pero de entrada, el documento al que han llamado Declaración de Granada sirve para que el partido encuentre su propia vía -en pleno proceso para darle un nuevo discurso al PSOE- y dé por cerrado un incómodo debate interno con una ­foto en la que todos dicen salir contentos. Hasta Pere Navarro, que ha hablado de "día histórico" porque su modelo coincide con el del PSOE, algo que, en efecto, no se ve cada día. "Hemos recuperado lo más importante con el PSC", remarcaba el propio Rubalcaba.

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Eso no significa que se acaben las diferencias entre PSOE y PSC. Para empezar sobre la posibilidad de celebrar una consulta sobre la independencia en Catalunya, cuestión que ni aparece en el documento aprobado este sábado. Y pasando también por la definición legal que puede hacerse de la comunidad: el PSC cree que Catalunya puede llamarse nación y el PSOE lo rechaza. Y eso que ambos remiten al mismo documento.