El PP tumba la comparecencia de Rajoy y rechaza una sesión de control en el Congreso
El PP confirma que no va a haber sesión de control mientras que insiste en su estrategia de proteger al presidente de los coletazos del 'caso Bárcenas'
Madrid
Todos los grupos de la oposición exigen que el pleno extraordinario de la próxima semana incluya la tradicional sesión de control al Gobierno para que Rajoy dé respuesta a las últimas revelaciones relacionadas con los denominados 'papeles de Bárcenas'. El PP, haciendo uso de su mayoría absoluta, ha confirmado que no habrá sesión de control.
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Así lo han defendido en la reunión de la Junta de Portavoces encargada de fijar el orden del día de esa sesión, según han explicado en declaraciones realizadas en la Cámara Baja antes del arranque de esa cita. Además, toda la oposición ha reiterado su intención de apoyar la petición de explicaciones a Rajoy sobre las "sospechas" que se ciernen sobre su partido y sobre él mismo, en una sesión plenaria monográfica. Este asunto centrará la reunión que tiene convocada este jueves la Diputación Permanente del Congreso, el órgano que ejerce las funciones del pleno en los periodos no ordinarios.
La oposición en el Congreso arremete contra el PP por hacer "saltar por los aires" un "acuerdo tácito" que había desde hace años para celebrar en julio un pleno ordinario con control al Gobierno y ha acusado al principal partido de "hundir" la dignidad de la Cámara por "pánico" a Bárcenas. Toda la oposición en bloque ha criticado la actitud del PP, al que han acusado se "secuestrar" y "amordazar" el Parlamento por "miedo" a todo el asunto relacionado con su ex tesorero.
El PP rechaza la comparecencia de Rajoy
El Partido Popular ha descartado esa posibilidad por entender que el pleno ya está muy cargado de asuntos, entre otros las enmiendas a la totalidad del proyecto de ley orgánica para la mejora de la calidad educativa. Este jueves se debatirán en la Diputación Permanente de la Cámara Baja tres peticiones de comparecencia extraordinaria en pleno del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para que dé explicaciones sobre las últimas revelaciones relacionadas con el caso Bárcenas, aunque se prevé que todas ellas sean rechazadas por la mayoría absoluta del PP.
El vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, defiende a Rajoy y considera que el Congreso "no puede ser el altavoz" ni la "caja de resonancia" de la estrategia de defensa de un preso preventivo como es el extesorero del PP Luis Bárcenas. Pons continúa afirmando que "es malo para las instituciones es que el Congreso sirva para amplificar la estrategia de defensa de una persona que aún no ha explicado de donde ha sacado 50 millones de euros".
Antes de participar en la reunión de la Junta de Portavoces, Pere Macías, de CiU, había expresado en declaraciones a los medios la necesidad de esa sesión de control al entender que en un momento como el actual es imprescindible la máxima transparencia por parte del Gobierno. También el portavoz adjunto del PNV, Pedro Azpiazu, ha compartido esa tesis, aunque ha precisado que al grupo vasco le interesa especialmente que haya sesión de control para aprobar una resolución conjunta sobre las ayudas a los astilleros.
Para Irene Lozano, de UPyD, España se encuentra en una situación de "emergencia democrática" por la "incomparecencia" del presidente del Gobierno, de otros miembros de su gabinete y de altos cargos del PP para dar responder a las sospechas que "ha sembrado" Bárcenas sobre la financiación ilegal de ese partido y los sobresueldos en B.
Rafael Larreina, de Amaiur, ha hecho hincapié en que la corrupción es "uno de los principales peligros" para el sistema democrático en cualquier lugar del mundo y que la única forma de combatirla es con la claridad.