Se cierra un juicio y empieza otro nuevo para Díaz Ferrán en la Audiencia Nacional
El juicio por la compra de Aerolíneas Argentinas queda visto para sentencia en la Audiencia Nacional el mismo día en que se da el paso previo para abrir juicio oral contra él por el 'operación Crucero' donde se le acusa de blanqueo de capitales, insolvencia punible y pertenencia a organización criminal
El juicio contra Gerardo Díaz Ferrán y Antonio Mata por la compra de Aerolíneas Argentinas y un supuesto delito contra la Hacienda Pública ha quedado visto para sentencia en la Audiencia Nacional el mismo día en que el juez Eloy Velasco le acusa de un delito de blanqueo de capitales y ve todo listo para abrir juicio oral por la 'operación Crucero'. En este segundo procedimiento, Velasco acusa a Díaz Ferrán, Ángel de Cabo y otras diez personas de de eludir "de forma fraudulenta" el pago a los acreedores de Viajes Marsans después de su quiebra.
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Día intenso para Gerardo Díaz-Ferrán en la Audiencia Nacional. A mediodía, el juez José María Vázquez Honrubia declaraba visto para sentencia el juicio por la compra de Aerolíneas Argentinas, apenas unos minutos después de que el juez Eloy Velasco de esta misma Audiencia Nacional preguntara a las partes si debe abrir juicio oral contra Díaz Ferrán por la 'operación Crucero', el supuesto vaciamiento de Viajes Marsans. En esta segunda investigación, el juez acuesa al expresidente de la CEOE preso en Soto del Real de varios delitos de blanqueo de capitales, insolvencia punible y pertenencia a organización criminal junto con otros once encausados.
El juicio por la compra de Aerolíneas Argentinas ha quedado visto para sentencia este lunes sin que Gerardo Díaz Ferrán haya hecho ningún alegado final al término de la última sesión del proceso. El otro acusado, el expresidente de Aerolíneas Argentinas Antonio Mata, sólo ha hecho uso de la palabra para decir al juez que se considera "absolutamente inocente".
Tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado ha considerado a los dos acusados como culpables de un delito contra la Hacienda Pública el entender que dejaron de pagar el Impuesto de Sociedades cuando formalizaron la compra de Aerolíneas Argentinas, presuntamente ocultando un incremento patrimonial que supuso esta compra en las cuentas de 2001 para "aminorar las consecuencias fiscales". El exjefe de la patronal se enfrenta a dos años y cuatro meses de cárcel y al pago de una indemnización de 99,04 millones de euros a Hacienda.
Paso previo a abrir juicio oral contra Díaz-Ferrán y Ángel de Cabo por la quiebra de Viajes Marsans
Mientras este juicio terminaba y quedaba visto para sentencia en la sala de vistas de la Audiencia Nacional, unos pisos más arriba el juez Eloy Velasco daba el paso previo a la apertura de juicio oral por la 'operación Crucero', la investigación sobre el vaciamiento y quiebra de Viajes Marsans. El juez ha transformado las diligencias previas de este caso en procedimiento abreviado y acusa a Díaz-Ferrán y otras 11 personas de varios delitos de blanqueo de capitales, organización criminal e insolvencia punible. Entre estos acusados se encuentra el empresario Ángel de Cabo, su esposa y su cuñado y el propio hijo de Díaz Ferrán, Gerardo Díaz Santamaría.
Las partes tienen ahora diez días para razonar ante el juzgado si solicitan apertura de juicio oral contra Díaz Ferrán y los otro 11 acusados, o si por contra solicitan el sobreseimiento de la causa. En este caso la justicia investiga si, tras la quiebra de Viajes Marsans, se eludió de forma fraudulenta el pago a los acreedores, iniciando supuestamente Díaz Ferrán "un proceso de enajenación tanto de las compañías del grupo empresarial como de los bienes y sociedades patrimoniales y de los bienes poseidos a través de éstas con el fin de excluir de dichos procedimientos los activos realizables".
Tanto Gerardo Díaz Ferrán como Ángel de Cabo se encuentran en prisión desde el pasado 5 de diciembre bajo fianza de cinco millones de euros junto con otros cinco miembros del entramado. Además, un juzgado de instrucción de Madrid investiga al expresidente de la CEOE por su participación en la quiebra de Seguros Mercurio.