Tormenta de críticas internas contra "los tiempos" de Rajoy
Dentro del PP, algunos cargos piensan que tardar tanto en anunciar al candidato europeo es "una falta de respeto hacia los electores y hacia el partido", además de "un gesto de altanería" de Mariano Rajoy
Los que conocen al presidente del Gobierno aseguran que él no tiene prisa y que de esta forma no quema a su candidato, posterga la tensión electoral y deja al PSOE sin contrincante. Este va a su primer examen en las urnas desde que llegó al poder.
Hace más de dos meses que Jaime Mayor Oreja dijo que no repetía como candidato del PP para las elecciones europeas y aún no se sabe quién le va a reemplazar. Dentro de la formación conservadora no comprenden que Mariano Rajoy esté tardando tanto en anunciar el nombre. Algunos dirigentes populares creen que es una "falta de respeto hacia los electores" y "un gesto de altanería" del presidente del Gobierno.
Más información
- Rajoy dice que pronto habrá candidato de PP pero él no está "encima del tema"
- ¿A qué espera el PP?
- Plantón de Rajoy a Obiang en Bruselas
- Padre Ángel: "Le he dicho a Rajoy que debería ayudar en los comedores sociales"
- El PP piensa en Cañete sin la certeza de que vaya a ser el candidato
- El PSOE, al Gobierno: "Si ya hay recuperación, reponga lo que recorta en dependencia"
En el Partido Popular muchas voces están descontentas por la forma en la que se está gestionando este proceso. No les parece normal que se hayan convocado los comicios del 25 de mayo y que se esté pidiendo ya el voto por correo para un 'número uno' aún sin confirmar. "Se pide un voto a ciegas. Un voto de confianza en el PP. Algo que en estos momentos es muy arriesgado tras los recortes y el incumplimiento del programa electoral", dice un diputado.
Además para muchos es "un juego peligroso". "Han aparecido otros partidos que nos pueden robar votos y hay que movilizar a los nuestros. Y precisamente mucha de nuestra gente está enfada con nosotros", comentan desde el ámbito municipal. Más de un cargo se ha encontrado, a pie de calle, con las quejas de afiliados y simpatizantes que no comprenden esta situación y hacen ver que tener un candidato invisible no da muy buena imagen. Primero, porque da la impresión de que Rajoy no sabe lo que quiere y, segundo, porque facilita que el PP se convierta en objeto de burla de Alfredo Pérez Rubalcaba.
Hay quien considera que lo que está pasando es, además, "un desprecio" de Rajoy hacia su propio partido porque no solo elige 'a dedo' a la persona que va a poner al frente de la lista sino que además, no ha tenido en cuenta las dificultades que ha supuesto tener que organizar toda la campaña sin el elegido.
Todos respetan que Rajoy tome las decisiones cuando crea conveniente pero consideran que, en esta ocasión, más que en otras, su insistencia en dejar claro que los tiempos los marca él, les puede perjudicar. Para unos es "su incapacidad para resolver". Para otros, "su estilo". Y destacan que hace bien poco quedó constancia de ello con la designación del líder del PP de Andalucía. Siempre apurando los plazos, hasta el último minuto.
Pero sus tiempos suelen desatar las críticas internas, los nervios y las especulaciones. Y es que Rajoy, al que tanto le molestan siempre los líos internos, con este sistema termina por fomentarlos. Y la prueba es que con la tardanza, en estas últimas semanas se ha asistido a un constante y desquiciante baile de nombres para el puesto.
En la cúpula del PP trabajan con la idea de que será Miguel Arias Cañete. Están convencidos de ello. Pero si finalmente lo es, no entienden por qué no lo ha dicho ya. No comprenden por qué mantiene viva la intriga. Y no les vale la justificación de que lo hace para que al ministro de Agricultura le dé tiempo a dejar atados sus temas.
"Nadie comprende lo que está ocurriendo", admiten desde Génova. Y, por eso, buscan explicaciones y saltan los rumores. Ahora la teoría es que se lo está pensando mucho porque está planificando una importante crisis de Gobierno. Otros resaltan, que conociéndole, buscará un ajuste y punto. Y hay quien todavía piensa que si puede no toca el Ejecutivo y que puede que se esté guardando un as en la manga que sorprenda y descoloque a todos. Las quinielas continúan.
En definitiva, todos aguardan un movimiento. Y está en sus manos. Los populares cruzan los dedos para que lo que está pasando ahora no se repita en las municipales y autonómicas, lo que provocaría la desesperación de sus barones.
Los que conocen a Rajoy dicen que no tiene prisa. El presidente del Gobierno siempre medita mucho sus decisiones pero esta vez aún más porque sabe que este va a ser su primer examen en las urnas desde que llegó al poder. Destacan que es su estrategia: que de esta forma no quema a su candidato, posterga la tensión electoral y deja al PSOE sin contrincante, sin una persona que responda a Elena Valenciano.