Rubalcaba ofrecerá pactar la reforma de la Constitución
Los socialistas rechazan la consulta pero descartan un "frente común" con el PP
El discurso que Alfredo Pérez Rubalcaba ultimaba ayer en su despacho y que esta tarde pronunciará en la tribuna del Congreso se empezó a escribir hace casi un año en Granada. Fue en esa ciudad en la que la dirección y todos los líderes territoriales del partido -también el PSC- acordaron una propuesta común para encauzar la reivindicación catalana: una reforma federal de la Constitución. Esa es la propuesta en la que incidirá el secretario general de los socialistas, que se opone a una consulta en Cataluña pero descarta un frente común con el Gobierno.
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"Lo que el PSOE acordó en Granada y ofreceremos este martes no es un nuevo proceso constituyente, sino reformar la Constitución que ya tenemos para que avance en un sentido federal", explica un dirigente socialista que reconoce, sin embargo, que la llamada tercera vía no parece abrirse camino en Cataluña por el hartazgo que provocó la negociación del Estatut. Por eso, este mismo dirigente lo plantea de otra manera: "Se trata de ofrecer un pacto para que Cataluña se quede en España a cambio de reconocer en la Constitución que es un territorio singular". Así se recoge en la declaración que aprobaron en Granada el pasado mes de julio: "Necesitamos reformar la Constitución para incorporar los hechos diferenciales y las singularidades políticas ".
La clave será cómo decida plantearlo Rubalcaba, que ha dedicado los últimos meses a reunirse en Cataluña con empresarios y representantes de la sociedad catalana y ha conversado con Pere Navarro para unificar el discurso. En el entorno del secretario general resumen que lo fundamental será su oferta de diálogo y de pacto para cambiar la Carta Magna. Los socialistas insisten en que las negociaciones entre partidos deben producirse en el Congreso.
Rubalcaba decidió hace varias semanas que era él quien debía fijar la posición de su partido en la Cámara, al margen de lo que hiciera Mariano Rajoy. El pasado 19 de marzo se entrevistó en su despacho durante más de una hora con el coordinador del PSC en el Congreso, Francesc Vallès, para empezar a preparar su intervención. PSC y PSOE mantienen sus diferencias sobre la consulta: uno está a favor y otro en contra; pero no es eso lo que se dirime este martes, sino la petición de Cataluña para que se le transfiera la competencia que le permite convocar referéndums. PSC y PSOE se oponen a ello.
Lo que sí han pedido varios diputados del PSC a Rubalcaba es que "dedique poco tiempo a decir que no a la consulta y se recree más en hacer propuestas concretas sobre el federalismo". Dirigentes del PSOE creen, sin embargo, que hoy no es el momento, que se trata, más bien, de llamar al diálogo entre partidos para que, una vez haya empezado esa negociación, cada uno plantee sus reformas.
En el PSOE saben la imagen que se produce en Cataluña -donde los resultados electorales del PSC son preocupantes- cada vez que PSOE y PP coinciden en rechazar la consulta. Por eso en Ferraz insisten en subrayar las diferencias que les separan del Gobierno y en que su postura "no tiene nada que ver con la del PP". "No hay ninguna posición conjunta, el PSOE lleva una posición autónoma", apuntó ayer el secretario de Organización, Óscar López.